Un general retirado no hace mucho tiempo dijo tener la solución para acabar de una vez por todas con las desconfianzas y desencuentros entre el presidente Santos y la cúpula militar y policial alrededor del proceso de paz. “… No es un experimento nuevo pero sí práctico: que Santos y la plana mayor de todos los generales se reúnan en un recinto a puerta cerrada, sin micrófonos, cámaras, celulares, nada de nada… Sólo el Presidente, los generales y almirantes e incluso los negociadores de La Habana encabezados por De la Calle… Y que dediquen todo el día, sin agenda, límites ni restricción temática alguna a preguntar y responder de todo y a todo… Le aseguro que si eso se produce, cuando todo termine la situación será otra”, precisó el general (r.) en diálogo informal con una fuente política cercana a EL NUEVO SIGLO.
No, gracias
En el alto Gobierno hay una creciente preocupación por lo que consideran “exceso de ideas creativas” de algunos alcaldes y gobernadores que están poniendo sobre la mesa para poder mover los millonarios recursos que tienen para obras y proyectos financiados con las regalías. Como ya no es posible reformar la Ley de Garantías Electorales y, por ende, la restricción para contratar y suscribir convenios interadministrativos empezará en menos de dos meses, entonces hay mandatarios departamentales y municipales que han propuesto mecanismos distintos para poder adjudicar esos contratos de forma ‘exprés’. Aunque varios mandatarios sostienen que se trata de fórmulas blindadas desde el punto de vista jurídico, Planeación Nacional y los OCAD (instancia clave en el proceso de regalías) tienen serias dudas sobre su viabilidad.
A distancia
La división entre los uribistas en la capital del país va siendo más visible con el pasar de las semanas y a medida que se acorta la cuenta regresiva para la inscripción de las listas al Concejo, lapso que arranca en junio y termina en la última semana de julio. Una fuente cercana a las toldas del expresidente Uribe indicó que el exmandatario ha preferido mantener una distancia frente a los pulsos entre los distintos sectores, entre ellos los de Francisco Santos y María Fernanda Cabal. “… Se volvería loco el (ex)presidente si tiene que estar todos los días resolviendo los pleitos internos del partido en Bogotá y el resto del país, para eso se crearon unas instancias departamentales y municipales que deben tratar de solucionar los líos, sólo si la crisis es insalvable entra Uribe”, precisó la fuente.
Cuenta regresiva
A medida que se las distintas campañas a la Alcaldía de Bogotá van definiendo sus equipos de trabajo y sientan las bases de las propuestas programáticas que someterán a consideración del electorado, se están refilando las estrategias publicitarias. Por ejemplo, EL NUEVO SIGLO conoció de una alta fuente del sector que uno de los candidatos está pensando en poner en su sede política, específicamente en la fachada, un gran reloj que lleve la cuenta regresiva del tiempo que le resta al alcalde Gustavo Petro para dejar el cargo. Hasta el momento están evaluando cómo se presentaría esa cuenta regresiva para que la ciudadanía la pueda entender fácilmente.