Tutela vs. umbral (I) | El Nuevo Siglo
Lunes, 17 de Junio de 2013

En los corrillos políticos se especula que la posibilidad de un convenio en el interior de la Unidad Nacional para viabilizar algún mecanismo que permita a los partidos pequeños poder fusionarse o hacer alianzas con miras a los comicios parlamentarios está más que descartado. Y, por lo mismo, se rumora que varios exmagistrados de primer nivel están estudiando la que podría ser la acción de tutela más importante de los últimos años, destinada a llevar a que la justicia ordene a la organización electoral que se abra una ventana que evite que estas facciones minoritarias no alcancen el umbral electoral en las elecciones de marzo próximo y, por ende, estén condenadas a desaparecer.

 

Tutela vs. umbral (II)

 

La estructuración de la acción de tutela tendría dos motivaciones principales, según trascendió. La primera se dirigiría a que los partidos y movimientos políticos pequeños han enviado cartas a la Casa de Nariño urgiéndole al Gobierno que la falta de reglamentación de la última reforma política, sobre todo en los aspectos relacionados con la escisión y las alianzas multipartidistas, pondría en riesgo la participación política de muchas organizaciones. Sobre esa base habría un hecho fáctico que comprobaría que fue el Ejecutivo el que no fue lo suficientemente diligente para impulsar una reforma, ya fuera legislativa o vía decreto reglamentario, que permitiera superar el vacío normativo que se generó a raíz del no desarrollo del acto legislativo.

 

Tutela vs. umbral (III)

 

El segundo elemento que sustentaría esa eventual acción de tutela se dirigiría a que si se mantiene la legislación electoral, entonces se produciría una restricción fáctica a la participación democrática, violando el principio fundamental del derecho a elegir y ser elegido, sobre todo para el caso de las minorías políticas. En otras palabras, que se iría en contra de la jurisprudencia constitucional que establece que es deber del Estado permitir la más amplia participación de partidos y movimientos, y es claro que si se mantiene la legislación (que no viabiliza la escisión o alianza multipartidista, al tiempo que parte de un umbral del tres por ciento, lo que implicaría sumar no menos de 450 mil votos para clasificar a la repartición de curules) varias organizaciones pequeñas estarían condenadas a desaparecer.

 

Demanda, plan A

 

La acción de tutela es el Plan B de los partidos pequeños para frenar el aumento del umbral. Ya la semana pasada los congresistas del MIRA, Carlos Alberto Baena y Manuel Virgüez, y el Director del Centro de Análisis y Asuntos Públicos y exviceministro del Interior, Juan Fernando Londoño, demandaron ante la Corte Constitucional el umbral del 3%, por considerar que la entrada en vigencia del mismo sustituye la Constitución al eliminar los derechos de las minorías políticas a participar y obtener representación política.

 

Argumentación

 

Según la argumentación de esa demanda, la supervivencia de los partidos y movimientos dependerá de alcanzar mínimo el 3% de los votos a Senado en las elecciones de marzo de 2014 (alrededor de 450 mil votos). Para el MIRA, los que no superen ese umbral, simplemente desaparecerán sin más ni menos de la arena política. Con esta norma, agregó la colectividad, lo único que se busca es desaparecer en las elecciones del 2014 a los partidos y movimientos políticos considerados como minorías y garantizar la permanencia de los partidos tradicionales. “La única posibilidad que queda para que esta norma no sea aplicada es una declaratoria de inexequibilidad”, dijo Baena.