Una vez sea definido hoy el nuevo gabinete es claro que el Congreso podrá arrancar con buen ritmo su trabajo en esta legislatura que se instaló el 20 de julio y si bien ha estado muy movida alrededor de la novedad de la bancada uribista en Senado y Cámara, en materia típicamente legislativa es muy poco lo que ha realizado en estas primeras tres semanas. Lo que sí es evidente es que aún sin saberse si seguían o no en sus cargos, casi todo el gabinete ya tiene listado de citaciones a las comisiones y plenarias por temas que van desde las emergencias climáticas y la reforma educativa hasta la crisis en las cárceles y el proceso de paz… El problema es que ahora será necesario ajustar las citaciones con los nuevos nombres de los titulares de las carteras.
¿Ir o no ir?
El hecho de que haya sido fijado para la segunda quincena de septiembre el debate en la Comisión II del Senado sobre las presuntas relaciones del expresidente y ahora congresista Álvaro Uribe con el paramilitarismo, puso a pensar a varios de los integrantes del Centro Democrático. Las posturas están divididas entre los parlamentarios que consideran que hay un buen tiempo para preparar todo un arsenal de pruebas y replicar los señalamientos del senador Iván Cepeda contra el exmandatario y, de paso, plantear un debate en el mismo escenario sobre la Farc-política. Sin embargo, también están quienes consideran que Uribe no debería asistir al debate, no sólo porque se dilató en el tiempo, sino porque si el exmandatario no va dejaría a Cepeda y los demás críticos, como se dice popularmente, con los crespos hechos.
Ojo a OIT
Una de las más importantes tareas del nuevo ministro o ministra de Comercio Exterior será la de poner atención a los problemas que puedan surgir en la aplicación de los TLC firmados por Colombia con otros países o bloques multinacionales ¿La razón? Las dificultades que se están denunciando en Estados Unidos y Europa en materia laboral y sindical. Si bien se trata de denuncias que no son nuevas y provienen de sectores de izquierda radical, es obvio que no se puede descuidar este flanco, sobre todo después de que la OIT volviera a poner el ojo crítico sobre la situación en Colombia, como lo advirtiera hace pocas semanas el entonces vicepresidente Angelino Garzón.
Rindiendo y viajando
En los pasillos de la Casa de Nariño se dice que el Jefe de Estado fijará una agenda mucho más exigente a su nueva nómina ministerial y que, incluso, habrá revisión de metas en plazos más cortos que los aplicados en el primer cuatrienio. La idea del presidente Santos, según trascendió, es que los ministros sean más proactivos y se tomen las regiones lo más posible, de forma tal que su presencia en Bogotá sea la apenas necesaria. También se especula que esta semana habrá movimientos a nivel de consejerías presidenciales y altas oficinas en la Casa de Nariño. Anochecerá y veremos.