La posibilidad de que el presidente Santos aplique nuevos cambios en el gabinete para afrontar el último año de su mandato está, por el momento, descartada. Tras culminar la jornada de rendición de cuentas por parte de los integrantes del gabinete, trascendió que salvo uno o dos relevos aislados, no habría remezón sustancial en los próximos doce meses. También se conoció que antes de que termine este mes serán suplidas las vacantes que hay en varias entidades e institutos descentralizados del orden nacional. Las mujeres mandarán la parada en los nombramientos que están pendientes. Los ojos, pues, estarán puestos en la link de la página web de la Presidencia de la República en que se anuncian las hojas de vida de candidatos a altos cargos.
¿Viable?
La idea del uribismo de estudiar la posibilidad de interponer una acción popular para que la ciudadanía se pronuncie en torno de si está de acuerdo o no con la decisión del Gobierno de vender a Isagen, causó sorpresa en altos círculos jurídicos. Un exmagistrado de la Corte Constitucional le dijo a un periodista de EL NUEVO SIGLO que la propuesta del uribismo no sólo era insólita porque se refiere a un anuncio gubernamental que no tiene fuerza de ley, sino porque en la práctica mientras se surte todo el proceso requerido para esa acción popular, es muy posible que el proceso de subasta y enajenación accionaria de la parte mayoritaria de la Nación en la empresa del sector energético ya se haya concretado.
Canal Capital
El pulso alrededor de la citación a las urnas para definir el proceso de revocatoria del mandato del alcalde de Bogotá, Gustavo Petro, podría llegar a Canal Capital. Simpatizantes de la campaña de revocatoria exigirán que en la programación del canal, que obviamente por ser oficial promociona las ejecutorias del gobierno Petro, se les otorgue un espacio en horario triple A para exponer las razones por las que consideran que el burgomaestre debe ser removido del cargo.
Ojo al ejemplo
Entre algunos de los más connotados líderes empresariales del país se estaría estudiando la posibilidad de enviar un mensaje conjunto a todos los candidatos y precandidatos presidenciales. La idea es sugerirles de la manera más cordial posible que la campaña se desarrolle dentro de los cánones del respeto y la tolerancia, pues difícilmente se le puede pedir a la ciudadanía que no acuda a la violencia ni las vías de hecho, cuando los dirigentes que aspiran a manejar los hilos de la Nación se traban a diario en polémicas agrias y cruzándose epítetos y acusaciones de grueso calibre.