Son muchos los rumores que corren en el Congreso respecto a los parlamentarios que no volverán a postularse en marzo. Uno de los nombres que más suena es el de un senador costeño. El martes, al ser interrogado por un periodista en torno de cuál sería su sucesor, dijo que ese cuento de que no volverá a lanzarse lo tenía “mamado” y agregó que “… no fui samperista pero le voy a responder con una de las frases de batalla del expresidente: aquí estoy y aquí me quedo…”.

Más juiciosos

Y hablando delCongreso, esta semana se vio que surtieron efecto las advertencias de las presidencias de Senado y Cámara acerca de que van a descontar días de sueldo a los parlamentarios ausentistas. Incluso, un asesor de uno de los más veteranos congresistas dijo que su jefe los había puesto a “estar de guardia” en las plenarias y comisiones para que no le pusieran falla mientras iba al baño o salía a tomarse un tinto en el salón social. Y la asistencia también se ve hasta altas horas de la noche pues se sabe que hay ONG y medios que están haciendo seguimiento a los senadores y representantes que se registran en las sesiones y se vuelan al poco tiempo.

¿Tregua navideña?

La posibilidad de que las Farc vuelvan a ordenar a sus frentes que ceses operaciones ofensivas en diciembre próximo, como una muestra de voluntad de paz, se podría abrir camino, pero no como resultado de las tratativas internas con el Gobierno, sino porque los países garantes y amigos del proceso de paz en La Habana así lo sugerirían de manera muy discreta en la Mesa de Negociación. Es más, no se descarta que se haga por intermedio de una carta firmada por los gobiernos de Venezuela, Chile, Cuba y Noruega. 

No, gracias…

Entre los más activos en la campaña uribista hay varios exministros del anterior gobierno. Eso ya se sabía, pero lo que ha sorprendido es que algunos de quienes ocuparon altos cargos en las dos administraciones de Uribe, incluyendo puestos en el gabinete, han sido contactados para que colaboren en la campaña pero han respondido que “muchas gracias, pero no”. Las razones de las negativas van desde una alta exigencia de sus ocupaciones en la empresa privada hasta respuestas muy diplomáticas respecto de que no están de acuerdo en las críticas tan ácidas al proceso de paz.

A lado y lado

Y hablando del uribismo, aunque no han tenido problema en ir identificando fuentes de financiación para su campaña, sí se han encontrado con que algunos de los particulares y empresas contactados con ese fin han advertido que también colaborarían para una eventual campaña reeleccionista. La tesis inicial de que quien ayudara a una orilla, le cerraba de inmediato la puerta a la contraria, parece estarse revaluando y se pone en evidencia que muchos de los aportantes de mayor prestigio se inclinarán, como se dice popularmente, por poner los huevos en distintas canastas… ¡Malicia indígena electoral!