Dilema rojo
En el partido Liberal sigue prendida la controversia interna en torno a lo que será la estrategia de la colectividad de cara a la contienda presidencial. Como se sabe, hay división entre los que consideran que el partido debería concentrarse en nombres como los del senador Luis Fernando Velasco o los de los exgobernadores Luis Pérez y Eduardo Verano, y quienes sostienen que las toldas rojas deberían insistir, como lo ha hecho el jefe único, el expresidente César Gaviria, en una posible alianza con el candidato presidencial independiente, Alejandro Gaviria. El problema es que el exministro sí quiere recibir el apoyo liberal, pero también tender puentes de alianza con la Coalición de la Esperanza, encabezada por Sergio Fajardo y los exliberales oficialistas Humberto de la Calle, Juan Manuel Galán y Juan Fernando Cristo. Todos ellos han advertido que hablan con el candidato Gaviria pero solo sí renuncia a un apoyo del oficialismo liberal del expresidente Gaviria. De hecho mañana habrá una reunión entre los esperanzados y el exministro de Salud para tratar este tema puntual.
Campanazo de Villalba
El senador liberal y exministro Rodrigo Villalba se refirió al tema de la campaña presidencial en su habitual columna en el diario regional La Nación, de su tierra natal huilense. “A ocho meses de las elecciones presidenciales, las cosas no están claras… La polarización, que se mantiene en el país, con logros previsibles que no se hacen esperar, donde los extremos del espectro político han desarrollado la estrategia de agudizarla con odio de clase de por medio, en busca de réditos electorales como es desaparecer o atomizar el centro para repetir el expediente de hace 4 años, donde la disputa final hacia la presidencia era entre la izquierda radical de Petro y la derecha con el que dijo Uribe. Resolver entre los que tienen miedo al comunismo de Petro frente al miedo que representa Uribe, lo cual se refleja en la reciente encuesta del Centro Nacional de Consultoría (CNC) donde los colombianos votarían 18% por un candidato izquierda y 28% por uno de derecha, mientras por el centro-izquierda un 6% y por la centro-derecha 7%”.
¿Nuevo Liberalismo, oportunidad?
De acuerdo con Villalba “… Alejandro Gaviria, quién nos descrestó con una buena campaña de expectativa, arranca la carrera con un marchitado 2,6% quien, en sus inconsistencias de carácter estratégico, se enredó y enredó al Partido Liberal. Muy complicada la situación del centro, todos con vetos y posturas cerradas excluyentes, parece estuvieran haciendo pinitos por una campaña a largo plazo, mas no para el 2022… El centro errático, atomizado y tibio, parece ir para ninguna parte. El resurgimiento del Nuevo Liberalismo con Galán, debería convertirse en oportunidad de apertura del centro y centro-izquierda para liderar una convergencia política que reviva esta opción y competir en mejores condiciones en esta carrera presidencial. Con lo que hay no es suficiente, se requiere un mayor esfuerzo”.
Urgen cónclave
Lo cierto es que en el liberalismo continúan considerando que el expresidente Gaviria debería convocar antes de que termine este mes una reunión de la bancada parlamentaria e incluso con varios dirigentes de la colectividad con el objetivo de exponer cuál es su estrategia y si le conviene a un partido con más de dos millones de votos y la mayor bancada en la Cámara seguir recibiendo portazos en la Coalición de la Esperanza.