En el Partido Conservador hay dirigentes que consideran que la colectividad debe empezar a defender de forma más decidida al exministro Juan Camilo Restrepo, jefe negociador gubernamental en el proceso de paz con el Eln.  Esto porque ya empiezan a escucharse pronunciamientos de parlamentarios liberales y de La U que enfilan baterías contra el exministro conservador, por lo que el partido debe evaluar las implicaciones y el costo político que tiene el que uno de sus más connotados dirigentes esté al frente de una negociación que apunta a ser más complicada que la que se llevó a cabo con las Farc. Es claro que una vez empiece la negociación, esta semana en Quito, los cuestionamientos irán aumentando y el conservatismo tendrá que hacer de guardia pretoriana de Restrepo así como La U y los liberales lo fueron en su momento de Humberto De la Calle, jefe negociador en La Habana.

Balances agridulces empresariales

La economía es impredecible. Esa es la conclusión de las juntas de comienzos de año de algunas empresas de primer nivel en distintos sectores productivos. Un exministro que hace parte de varias juntas directivas indicaba esta semana que así como para algunas empresas 2016 fue muy negativo y tuvieron que recortar inversiones, planta personal y los resultados en los libros cerraron en rojo, a otras, por el contrario, el año pasado les dejó un buen sabor, sobre todo los últimos tres meses, lapso en que las ventas y la tasa de consumo de los hogares pareció tener un repunte inesperado. Incluso el anunciado aumento del IVA del 16 al 19 por ciento llevó a que muchas personas adelantaran compras e inversiones que tenían previstas para 2017 y las hicieran en noviembre y diciembre para esquivar el impacto del apretón tributario.

Las empresas y los escándalos

En el gremio de los consultores hay quienes sostienen que la expulsión de la multinacional Odebrecht y de sus filiales por parte de la Cámara Colombiana de la Infraestructura (CCI) fue acertada, dada la magnitud del escándalo de los sobornos que se puso al descubierto en semanas recientes, pero no se entiende por qué muchas otras empresas que en el pasado se vieron involucradas en escándalos como el ‘carrusel de la contratación’, anomalías con obras financiadas con regalías y otros casos de corrupción no fueron expulsadas.  “… Pertenecer a un ente tan fuerte y respetable como la CCI da un estatus de legitimidad y probidad y muchas instituciones publica y privadas lo toman como un indicador de transparencia, cumplimiento y seguridad”, dijo un reconocido empresario en charla con varios periodistas alrededor del tema Odebrecht.

Cabecillas de Farc no quieren vitrina

En círculos cercanos a las Farc se asegura que esa organización en trance de reinserción a la vida civil ya tiene absolutamente claro que algunos de sus cabecillas no están aspirando a tener gran figuración política una vez se termine todo el proceso de desmovilización y desarme. Se dice que algunos de los jefes se tomarán un tiempo para tratamientos médicos e incluso para rehacer sus relaciones familiares. “… Aquí hay quienes cortaron hace mucho tiempo nexos con sus hermanos, padres e hijos, y más de uno de los jefes quiere un tiempo para rehacer sus familias o formalizar relaciones sentimentales de vieja data en la guerrilla… También hay otros que volverán a Cuba pero ya para temas de tratamientos médicos pendientes y algunos que han dicho que los liderazgos deben dividirse entre las figuraciones públicas y la toma de decisiones en privado, donde quieren estar”, indicó una fuente muy cercana a esa organización subversiva.