Era previsible que la Corte Penal Internacional (CPI) emitiera algún tipo de pronunciamiento respecto a la Jurisdicción Especial de Paz (JEP), cuyo proyecto de acto legislativo se está tramitando en el Congreso. Aunque se había dicho meses atrás que la CPI solo empezaría a pronunciarse a partir de las primeras sentencias de dicha jurisdicción (creada exclusivamente para juzgar a los guerrilleros, militares, milicias y civiles que hayan cometido delitos relacionados con el conflicto armado), algunos sectores jurídicos habían hecho saber que el tribunal internacional tendría que sentar posturas antes porque, de no hacerlo, luego se enfrentaría a hechos cumplidos, es decir leyes y reformas constitucionales aprobadas y en vigencia.
La carta de la CPI (II)
De allí que la carta publicada este domingo en la revista Semana por parte de la Fiscal de la CPI, Fatou Bensouda, en la que advierte peros al proyecto de la JEP, especialmente en lo que tiene que ver con las “responsabilidad de mando” de los cabecillas de organizaciones armadas sobre las acciones y delitos cometidos por sus subordinados, tuvo que ser analizada de forma muy seria por ese Tribunal a sabiendas de sus consecuencias e implicaciones en el proceso de implementación normativa del acuerdo de paz. Dicha carta es, a todas luces, un campanazo de alerta en el que la CPI deja en claro que no le gusta esta jurisdicción y cuáles son los riesgos de no hacer caso a sus observaciones, pues las sentencias que se vayan a emitir están desde ya signadas por la incertidumbre y la inseguridad jurídica. A lo que la CPI podría responder en su momento que todo ello se advirtió con debida antelación.
La U sigue tras jefatura única
Todo hace indicar que en el partido de La U hay quienes consideran que debe apostarse por una jefatura única, no solo de cara a la campaña electoral que se avecina y al proceso de implementación normativa del acuerdo de paz con las Farc, sino en lo referente a las posturas políticas sobre los temas coyunturales que debe asumir la colectividad en su día a día. Según lo dijo un senador de esa facción política a un periodista de EL NUEVO SIGLO, en varias ocasiones “…algunas declaraciones de (Armando) Benedetti reflejan posturas y opiniones muy personales, que si bien son respetables no consultan la generalidad del partido o ni siquiera han sido puestas a discusión con anterioridad en la bancada”.
La candidatura de Piedad
La posible candidatura presidencial de la exsenadora Piedad Córdoba sería lanzada antes de mitad de año y si bien se daría por un movimiento que ella está creando, no está claro todavía que vaya a tener el apoyo del partido “Voces de Paz” que se supone será la base de acción política de las Farc una vez se desarmen y pasen a la legalidad. Según se dice en varios sectores de izquierda, el lanzamiento de Córdoba no tiene consenso en la cúpula de las Farc, en donde se considera que la “coalición por la paz” debe tener un tono más conciliador, con el fin de sumar votos no solo de la izquierda sino de otros sectores de centro.
Conservadores y exgobernador Ramos
Tal como se había anunciado en esta Sección semanas atrás, en el Partido Conservador hay quienes consideran que debería buscarse un acercamiento con el exgobernador Luis Alfredo Ramos de cara a un posible regreso del dirigente político antioqueño a las toldas azules. Ramos, como se sabe, estuvo preso por un proceso de parapolítica, pero recobró su libertad hace algunas semanas y confía en que antes de marzo la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia archive su caso, con lo cual tendría vía libre para volver a ser política de forma abierta. Ya el Directorio Conservador anunció que buscará ese contacto con Ramos, pero en las toldas uribistas también se especula que podría ser un cuarto precandidato.