La modificación que se le hizo a la pregunta base del referendo sobre reglas para la adopción en Colombia, en la Comisión Primera del Senado, el miércoles pasado, generó ayer una intensa polémica entre constitucionalistas, ya que mientras algunos sostenían que apenas fue un ajuste del texto y que este se enmarca dentro del propósito de la enmienda constitucional que fue respaldada por más de dos millones de firmas, otros juristas advirtieron que es un vicio grave el que se cometió y que debería tenerse en el retrovisor como referente lo que pasó con una modificación al texto de la pregunta del referendo reeleccionista que buscaba abrirle paso a un tercer período de Álvaro Uribe y que fue tumbado por la Corte Constitucional.
Aplazadas muchas agendas ministeriales
La próxima semana la mayoría de los ministros tiene agendadas distintas participaciones en eventos relacionados con la campaña a favor “del” Sí en el plebiscito. Por lo mismo, las agendas de citas que estaban fijadas desde hace algún tiempo fueron modificadas sustancialmente en varios despachos y reprogramados muchos encuentros para después del 2 de octubre. Según un alto asesor de uno de los llamados “ministerios técnicos”, aunque se pensaba que habría inconformismo por partes de quienes veían aplazadas sus citas, la mayoría entendió la razón e incluso se ofrecieron a organizar eventos sectoriales para que los titulares de cartera pudieran ir a pedir el voto para la refrendación del acuerdo con la guerrilla.
No al que quiere, sí al que no quiere…
Las paradojas del proceso de paz están a la orden del día. Por ejemplo, como lo recordaba esta semana un exministro de este Gobierno, no dejaba de ser curioso que mientras el expresidente Andrés Pastrana pedía una cita con el máximo comandante de las Farc, alias Timochenko -opción que le fue negada-, ese mismo cabecilla subversivo había cursado invitación semanas atrás al expresidente Álvaro Uribe para que asistiera a La Habana y se reuniera con la mesa de negociación para analizar sus reparos hasta este momento pactado. Uribe, de inmediato, desechó esa posibilidad e insistió en que las posturas de Centro Democrático alrededor de la negociación con la guerrilla de La Habana eran conocidas públicamente.
Remociones en gremios económicos (I)
Y hablando del uribismo, algunos de sus parlamentarios sostienen que finalmente, dos años después de la segunda vuelta presidencial, se habría concretado la “conjura” desde del alto Gobierno para remover o debilitar al máximo a dos de los cuatro dirigentes gremiales que en su momento manifestaron simpatía por el candidato Oscar Iván Zuluaga. Señalan concretamente los casos del presidente de Fedegán, José Félix Lafaurie, y el presidente de la SAC, Rafael Mejía López.
Remociones en gremios económicos (I)
El primero, como se sabe, ha mantenido un continuo enfrentamiento con el Gobierno e incluso lo acusa de decisiones retaliatorias, el haberle quitado el manejo de los fondo parafiscales al Fondo Nacional del Ganado y la liquidación de Friogan. Y del segundo dicen los uribistas que terminó saliendo de la SAC, después de muchos años de liderarla. En el alto Gobierno, por el contrario, se asegura que las medidas sobre el tema Fedegán están sustentadas legalmente, en tanto que señalan que el presidente de la SAC renunció para asumir un cargo más importante como presidente de la Bolsa Mercantil Agropecuaria. En su momento, el propio Mejía desmintió que apoyara candidatura alguna en la contienda presidencial.