Sonajero para CNE
Mientras que toda la expectativa política sigue centrada en cuál será el mapa político de las presidencias del Congreso y las catorce comisiones permanentes, así cómo se desenvolverá la elección del Contralor General por parte del Parlamento que se instala mañana, hay otros movimientos que no son tan visibles pero sí muy importantes. Por ejemplo, ya se empiezan a escuchar nombres de candidatos al Consejo Nacional Electoral, otra elección a cargo de este nuevo Congreso y en donde todos los partidos tienden a jugarse a fondo. Por ejemplo, en las toldas de los conservadores empezó a sonar una posible aspiración de la saliente senadora huilense Esperanza Andrade. También se habla en los corrillos políticos del nombre de Benjamín Ortiz, secretario privado del Registrador Nacional y quien conoce al dedillo el CNE, ya que ha sido un funcionario de carrera. A estos nombres se suma el del exrepresentante liberal Harry González. Lo cierto es que se trata de nueve cargos y es claro que la coalición del Pacto Histórico buscaría, como mínimo, dos cupos.
A la espera
Y hablando de conservadores que también estarían a la espera de participar en el gobierno del presidente electo Gustavo Petro, se habla del dirigente tolimense Alfredo Bocanegra, quien desde un principio apoyó al candidato del Pacto Histórico. Bocanegra fue parlamentario y director de la Aeronáutica en el gobierno Santos y se dice que podría estar siendo contemplado para ir a la presidencia en la Agencia Nacional de Infraestructura. Hasta el momento de los cargos del sector transporte no se ha especulado mucho en los corrillos políticos, en gran parte porque hasta ayer -al cierre de esta edición- el presidente electo, que llegó el fin de semana a Colombia tras dos semanas de vacaciones en Italia, no ha indicado quién será el nuevo ministro de esta cartera.
Sin alud de renuncias
Se está a la espera de que la Cancillería oficialice todos los nombres de los funcionarios que quedarán encargados de las embajadas y consulados en donde ya se oficializaron las renuncias de sus titulares debido al cambio de gobierno. Una alta fuente de esa cartera señaló que, “al final de cuentas, las dimisiones no fueron tantas como se esperaban”. No hay que olvidar que tras el triunfo de Gustavo Petro el pasado 19 de junio, se habló una cascada de renuncias en las embajadas, sobre todo de aquellas ocupadas por dirigentes de clara extracción uribista que, se presumía, no estarían un solo día, después del 7 de agosto, día de la posesión presidencial, representando en el exterior a un gobierno de izquierda con el que tienen claras diferencias políticas e ideológicas. Como no hubo alud de dimisiones, ahora se espera que el día de la transmisión de mando se presenten todas las renuncias protocolarias de titulares de embajadas y consulados, pero sus relevos tardarían, debido al proceso diplomático regular, varios meses.
Leyva, muy discreto
Uno de los temas que más ha sorprendido es la labor callada y alejada de la exposición mediática que está desempeñando el designado ministro de Relaciones Exteriores, Álvaro Leyva. Se dice que ya tiene avanzados los nuevos lineamientos en materia de política internacional que se aplicarán a partir del 7 de agosto. También se especula en los corrillos políticos que Leyva ya estaría adelantando contactos preliminares con la guerrilla del Eln, a través de los delegados y cabecillas que están en Venezuela y Cuba. No se descarta, tampoco, que ya hubiera dialogado con voceros del régimen de Nicolás Maduro. Lo que sí está confirmado es que trabajó con Petro en la escogencia de los nuevos embajadores en Estados Unidos y la OEA, Luis Gilberto Murillo y Luis Ernesto Vargas, respectivamente.