Tono diplomático
Si bien el expresidente Álvaro Uribe prefirió no controvertir con el saliente comisionado de Paz, Miguel Ceballos, quien acusó al exmandatario de haber realizado gestiones de paz con la guerrilla del Eln sin haberlo consultado previamente, el uribismo no guardó silencio. “… Siento una incomodidad con el expresidente Uribe, y se refiere a algo esencial que tiene que ver con mi trabajo como Comisionado. En dos ocasiones, desafortunadamente, no fui consultado por Uribe en un par contactos que tuvieron él y representantes suyos con el Eln”, dijo Ceballos en la entrevista a El Tiempo. A ello le replicó el sábado, en twitter, el propio exmandatario señalando que “…. el doctor Miguel Ceballos es una muy buena persona, qué le voy a contestar yo que tengo tantos enemigos malas personas!”.
Tono de réplica
Sin embargo, en el Centro Democrático no fueron tan diplomáticos. En su página web apareció un comunicado oficial, aunque sin firma, titulado “¿Qué pretende Miguel Ceballos?”. Allí se indicó que “la abrupta renuncia de Miguel Ceballos, Alto Comisionado de Paz y delegado principal para negociar el paro, es un acto de deslealtad en el momento más inoportuno, que evidencia que no estuvo a la altura de las difíciles y trascendentales tareas a su cargo. No se renuncia por ‘incomodidades’ cuando se tiene una alta responsabilidad en medio de la crisis que atraviesa el país. Insólito además, que invoque gestiones del expresidente Álvaro Uribe Vélez, que conoce en detalle el presidente de la República Iván Duque. Hay que poner fin drásticamente al grave y continuo daño que hacen al tejido económico y social de la Nación quienes allanan los terrenos legales de la inconformidad”.
Tono acusador
Pero la réplica no terminó allí. En el mismo comunicado oficial se dijo que “en el Centro Democrático reiteramos que los bloqueos, el vandalismo, la destrucción del patrimonio común y los múltiples intentos por asfixiar la economía, son ilegales e inaceptables y se deben enfrentar con decisión y con autoridad, siempre bajo el respeto de los DDHH. Exhortamos al gobierno a perseverar en esa ruta, con funcionarios idóneos para enfrentar los muy graves retos del momento”. No hay que olvidar que Ceballos dijo en la citada entrevista que él no pertenecía al Centro Democrático y que su jefe era presidente Duque y no el exmandatario Uribe. En el resto de la bancada uribista también se replicó la acusación del saliente Alto Comisionado, en tanto que en otras instancias de la oposición se especuló que Uribe podría ser denunciado penalmente por hacer gestiones con el Eln sin ser autorizado previa y formalmente por el Gobierno.
Tono de sospecha
Para algunos dirigentes uribistas el problema con Ceballos no tiene relación con sus roces con Uribe por el tema de los contactos con el Eln, en gran parte porque él mismo admitió que desde diciembre le había informado al presidente Duque que quería salirse del Gobierno. En las toldas del Centro Democrático aseguran que el Alto Comisionado tenía aspiraciones de ser ministro, sobre todo de llegar a la Cancillería, pero que la designación la semana pasada en esa cartera de la vicepresidenta Marta Lucía Ramírez, en reemplazo de Claudia Blum, le frustró la expectativa y por eso decidió hacer efectiva de un día para otro la carta de renuncia irrevocable que había presentado el 3 de mayo, alegando “razones personales”.