Proceso delicado
En la cumbre de gobernadores del pasado martes en Boyacá uno de los temas sobre los cuales varios mandatarios departamentales llamaron la atención en torno a las implicaciones que tendría el proceso tanto para lo que resta de su gestión como para el de los sucesores que sean elegidos en octubre próximo, fue el relativo a las encuestas del Sisbén IV, cuya última etapa comenzó en marzo pasado con el fin de actualizar la información de la población para acceder a los programas sociales que brinda el Estado a los sectores más vulnerables del país. Es una tarea compleja toda vez que esta última etapa abarca a 609 municipios, entre ellos ciudades como Bogotá, Cali, Medellín, Barranquilla y Tunja, capitales en las que, según el Departamento Nacional de Planeación, entidad liderada por Gloria Alonso, se espera la aplicación de por lo menos 8 millones de encuestas.
Difícil e impopular
“…Ese es uno de los procesos más importantes que se están realizando en estos momentos, ya que este nuevo Sisbén entrará a regir en 2020”, dijo uno de los gobernadores, al llamar la atención en torno a que los nuevos mandatarios departamentales, pero sobre todo los municipales, entran con la “difícil tarea” de aplicar las nuevas clasificaciones, que “por lo general siempre implican sacar de las bases de datos de los subsidios a personas que están coladas y no cumplen los requisitos de vulnerabilidad para recibir los subsidios del Estado… Ese no es un proceso popular ni mucho menos, en los que los alcaldes tendrán que gastar una parte de su capital político de entrada”. De acuerdo con el Mandatario seccional, que pidió la reserva de su nombre, “… no nos digamos mentiras: en muchos pueblos se hace política con promesas de meter a los votantes al Sisbén, sobre todo en los niveles más bajos para recibir así mayores ayudas estatales”.
Nuevas reglas
Las nuevas reglas del Sisbén serán determinantes, ya que aplicarán mejoras tecnológicas, metodológicas y operativas que permitirán ofrecer información de mayor calidad para dirigir el gasto social y constituirse en un insumo para el diseño de política pública. Para ello es clave la confección de las encuestas pues a través de los cuestionarios sobre temas de vivienda, niñez, salud, educación e ingresos, los programas sociales podrán ser mejor focalizados. Según Planeación Nacional, el barrido de actualización para la implementación del Sisbén IV se realiza a través de una aplicación instalada en un teléfono celular, lo que permitirá que la recolección de la información e identificación de los hogares sea más rápida, fácil y segura. Para evitar que las personas hagan trampa, se ha advertido que los hogares que sean encuestados no deben esconder sus electrodomésticos. Tenerlos no influye en el puntaje que tendrá la respectiva familia.
Licitación millonaria
Hay mucha expectativa en torno a la millonaria licitación que viene adelantando el SENA. Hasta el próximo 12 de agosto se podrán presentar oferentes para participar en la contratación del operador de servicios tecnológicos para las sedes del instituto en todo el país. Se trata de un proceso que costará por lo menos $723.000 millones pues el operador seleccionado deberá garantizar una conectividad óptima y de mayor velocidad para todas las sedes del SENA. La idea es hacer más eficiente la operación para cerca de 38.000 colaboradores y más de 7 millones de colombianos que anualmente se forman en estos ambientes. El pasado 19 y 22 de julio se llevó a cabo la audiencia de asignación de riesgos del proceso licitatorio. El proceso cuenta con la Universidad Nacional como aliado estratégico y garante del proceso, así como acompañamiento de la Procuraduría y Veeduría Ciudadana.