Duque y los embajadores

Mientras que desde las toldas de la oposición se continúa insistiendo en que el gobierno Duque está utilizando la nómina diplomática para pagar favores políticos, en la Casa de Nariño se sostiene lo contrario e incluso se afirma que esta administración está aumentando la participación de los diplomáticos de carrera en el servicio exterior. El martes, con ocasión de la posesión de varios embajadores, el propio Presidente de la República afirmó que en el pasado después de muchas conversaciones entre la Academia Diplomática, los funcionarios del Ministerio de Relaciones Exteriores y gobiernos de turno, se había establecido que el porcentaje de embajadores pertenecientes a la carrera diplomática sería del 20%. Frente a ello, el Jefe de Estado sostuvo que con las nuevas designaciones su Gobierno había alcanzado el porcentaje más alto de representación de la carrera diplomática en nuestras embajadas y en embajadas importantes y estratégicas, llegando al 30%.

Duque, Brasil y México

El Jefe de Estado insistió que su meta es ir más allá, puesto que prontamente se pondrá en discusión un decreto para cumplir la meta de que para agosto de 2022, cuando entregue el poder, ese porcentaje de funcionarios de carrera en las embajadas sea, como mínimo, del 50%. “…Creo que nuestra meta, para finalizar nuestro Gobierno en el 2022, es que la carrera diplomática no tenga nada que envidiarle a Itamaraty. Que no tenga nada que envidiarle al servicio exterior mexicano, en el plano regional, y además ir pensando en el desarrollo de una diplomacia del siglo XXI”. Agregó que hoy el 46% del servicio consular es de funcionarios de la carrera y aumentará ese porcentaje de aquí a su último año de gobierno.

Duque y los empresarios

Dentro de la apretada agenda que tuvo ayer el presidente Iván Duque, varios apartes de sus discursos llamaron la atención. Por ejemplo, en su intervención en la Macrorrueda de Negocios, recordó que cuando aspiró a la Presidencia de la República “siempre dije que teníamos que quitarle ese sentido vergonzante que han tenido muchos dirigentes en Colombia frente al desarrollo empresarial, que se han dejado intimidar por debates donde lo que se quiere señalar es al empresario con el término despectivo de rico, como si se tratara de separar y seguir dividiendo la sociedad y como si la generación de bienestar fuera un pecado”. Dijo que cuando llegó a la Casa de Nariño “…le dije al país que teníamos que tomar una decisión, ver al empresario como ese generador de bienestar y no simplemente como esa fuente de ingresos fiscales, donde todas las reformas tributarias estaban siempre encaminadas a hacerle más difícil, más obstructivo el desarrollo a la empresa y en casi nueve meses de gobierno puedo decirles a ustedes que hemos dado señales muy claras”.

Rosario de impedimentos

En el Congreso circulan muchas versiones sobre lo que será la votación de las objeciones presidenciales al proyecto de ley estatutaria de la Jurisdicción Especial de Paz (JEP) la próxima semana. Se dice, por ejemplo, que los debates en las respectivas plenarias serán muy demorados, ya que se tendrá que evacuar una gran cantidad de impedimentos de senadores y Representantes a la Cámara. “…Mire, para solo darle un ejemplo: lo invito a que revise lo que pasó el año pasado, cuando se trató de votar en comisiones y plenarias el proyecto del uribismo para reformar la JEP… Hubo un rosario de impedimentos y ahora la cuestión será mayor…”, precisó un Senador a un periodista de EL NUEVO SIGLO.