¿Baraja para Registrador?

En los corrillos políticos se asegura que el exsenador uribista Jaime Amín, actual alto consejero político en la Casa de Nariño, estaría sonando desde ya como una posible carta fuerte del gobierno Duque para la Registraduría Nacional del Estado Civil. También se dice en los mentideros políticos que Carlos Camargo, actual director ejecutivo de la Federación Nacional de Departamentos, podría estar interesado en el cargo. De la misma manera suena el exrepresentante Samuel Hoyos, quien hasta diciembre pasado era parlamentario por Bogotá, renunció para ser precandidato a la Alcaldía capitalina, pero en las encuestas internas le ganó el tiquete la concejala Ángela Garzón. Como es apenas obvio la posibilidad de que uribistas purasangre como Amín u Hoyos puedan optar por la Registraduría, ya prendió las alarmas en el Congreso, pese a que la escogencia del alto funcionario no se realiza por postulación de ternas sino por un concurso de méritos.

Galindo hasta diciembre

Como se sabe, los presidentes de la Corte Suprema de Justicia, el Consejo de Estado y la Corte Constitucional son los que convocan dicho concurso de méritos, en ejercicio de las facultades conferidas por el Artículo 266 de la Constitución, modificado por el Artículo 15 del Acto Legislativo No. 1 de 2003 y el Acto Legislativo 02 de 2015, la Ley 1134 de 2007 y el Artículo 20, inciso segundo, del Acuerdo 001 de 2007. En octubre de 2015, ese concurso determinó que la lista de elegibles era encabezada por Juan Carlos Galindo, el hoy magistrado de la Corte Constitucional, Antonio José Lizarazo y el exmagistrado Jaime Araújo Rentería. Tras verificar que Galindo no tenía inhabilidad alguna, los presidentes de los máximos decidieron “por mayoría” elegir a Galindo, quien se posesionó el 4 de diciembre de 2015. Es decir que apenas le quedan ocho meses en el cargo.

Puja por el Concejo

La campaña para el Concejo de Bogotá está como para alquilar balcón. Una alta fuente del Cabildo Distrital le dijo a un periodista de EL NUEVO SIGLO que hay “pesos pesados” que encabezarían algunas de las listas de los partidos, desplazando incluso a algunos de los más votados en el actual Concejo y que consideran que, por ello, deberían tener prevalencia a la hora de que los directorios capitalinos escojan a quién encabezará la respectiva plancha. En el entretanto, todos los días surgen más noticias sobre los candidatos. Por ejemplo, días atrás se indicó en los corrillos políticos que el exconcejal por el partido de La U, Javier Palacio, estaría buscando un cupo para entrar en la lista al Concejo por el Centro Democrático, y para ello tendría el apoyo del representante uribista Edward Rodríguez, el más votado para la Cámara en los comicios parlamentarios del año pasado.

Reforma política

En los círculos parlamentarios se asegura que el panorama para el proyecto de reforma política y electoral es cada día más complicado, no solo por el tenso ambiente partidista, sino porque entre los senadores y Representantes a la Cámara parece abrirse paso la opinión de que la actual iniciativa es muy tímida en materia de depuración de las malas prácticas de las colectividades y las trampas proselitistas. Sin embargo, otros congresistas sostienen que ese proyecto es el que “más seguro” tiene su trámite y aprobación antes de junio, debido al “articulito” que le da a los parlamentarios la posibilidad de incidir en la destinación del 20% del presupuesto de inversión anual, que para este año es superior a los $9 billones.