¿Jugada fajardista?
En la Alianza Verde, como en todos los partidos, los corrillos políticos están siempre a la orden del día. Por ejemplo, algunos dirigentes de esa colectividad consideran que la insistencia del fajardismo en que la exsenadora Claudia López sea candidata a la Alcaldía de Bogotá en los comicios de octubre próximo tiene como único fin sacarla desde ya de la carrera presidencial para 2022, en donde el exalcalde de Medellín y exgobernador de Antioquia quiere repetir aspiración a la Casa de Nariño, según lo confirmó la semana pasada. La curiosa tesis parte de la premisa de que si López quiere ser la candidata de la coalición verde-fajardista para la sucesión de Enrique Peñalosa, entonces tendría que descartar desde ya, sea cual sea el resultado en las urnas en octubre, ser precandidata presidencial en dos años para la sucesión de Iván Duque.
Campaña muy fría
Y hablando de la contienda por la Alcaldía de Bogotá, un senador liberal que fue consultado por un periodista de EL NUEVO SIGLO respecto a cuál debería ser la estrategia de su partido para competir por este cargo, respondió que “…no sé qué estaba pensando el expresidente César Gaviria al respecto”, pero que lo que más le sorprendía de todo lo que estaba pasando era que faltando “poco menos de nueve meses” para la cita en las urnas la campaña esté “tan fría”, sin candidatos fuertes ya lanzados y la mayoría de los partidos “…como en las carreras de velocidad en ciclismo de pista: todos a parados en los pedales esperando que el otro sea el que acelere primero”.
Pulso por casas
Hace un año por estas fechas el entonces gobierno Santos anunciaba avances sustanciales en la Fase II del Programa de Vivienda Gratuita. Se indicaba que en 63 municipios de siete departamentos se construirían 10.545 casas gratis, con una inversión superior a los $556.500 millones. Nariño, Putumayo, Valle del Cauca, Quindío, Cesar, Norte de Santander y Magdalena serían los departamentos más beneficiados. Sin embargo, como se sabe, este programa perdió impulso una vez llegó al poder el gobierno Duque, lo que ha sido fuertemente criticado por la bancada de Cambio Radical que, incluso, sostuvo fuertes debates con el Ministerio de Vivienda, en cabeza de Jonathan Malagón. Un nuevo round alrededor de este tema se dará a partir de marzo cuando el Congreso empiece a discutir el proyecto de ley sobre vivienda presentado por este último. Desde ya se sabe que el partido del exvicepresidente Germán Vargas Lleras cargará duro contra esa política.
Eln, hace un año y hoy
“Con el Eln -como muchos de ustedes saben bien, porque pertenecen al Grupo de Países Amigos- las negociaciones se suspendieron porque esta guerrilla no quiso prolongar el cese del fuego y, por el contrario, reanudó sus actos terroristas. A esta organización le hemos exigido que tenga un mínimo de coherencia entre sus palabras de paz y sus acciones. Mientras no exista esa mínima coherencia por parte del Eln, reanudar los diálogos va a ser imposible. Y mientras tanto, la Fuerza Pública tiene la orden precisa de actuar con toda firmeza y efectividad”. Esas eran las palabras un año atrás del presidente Santos sobre la suspensión del proceso de paz con esa guerrilla después del atentado contra la Policía en Barranquilla. Un año después, el proceso se rompió hace tres semanas, esta vez por un atentado contra la Policía en Bogotá y la tesis del gobierno Duque fue la misma: la guerrilla no suspendió el terrorismo y no hubo coherencia entre sus palabras de paz y sus acciones violentas.