Protocolos con EU (I)

Un día después de que el gobierno Duque y el de Cuba volvieran a medir tesis en torno al cumplimiento o no de los protocolos pactados por la administración Santos con el Eln en caso de ruptura del proceso de paz, lo que en efecto ocurrió hace dos semanas tras el atentado de esa guerrilla contra la Escuela de Cadetes de la Policía en Bogotá, la representante a la Cámara por Bogotá a nombre de la Alianza Verde, Juanita Goebertus, planteó crear otros protocolos, pero no para el caso del Eln, sino frente a la insólita situación que se denunció ayer en torno a que la petición que semanas atrás hiciera la Jurisdicción Especial de Paz (JEP) para que Estados Unidos entregara más pruebas sobre su solicitud de extradición del excabecilla desmovilizado de las Farc, alias ‘Jesús Santrich’, nunca llegó al gobierno norteamericano porque la carta respectiva, por un error de correo, quedó ‘varada’ en Panamá.

Protocolos con EU (II)

Goebertus, quien fue asesora del gobierno Santos en el proceso de paz con las Farc, indicó que “valdría la pena que se sentaran en una misma mesa el Gobierno colombiano, el gobierno de Estados Unidos y, por supuesto, la Jurisdicción Especial de Paz para, como ha sucedido en el pasado, establecer un protocolo de cooperación judicial que le permita a magistrados de la JEP ir a EU a conocer de primera mano esas pruebas (las de la justicia estadounidense contra ‘Santrich’) y poder tomar una decisión”, propuso Goebertus. Agregó la parlamentaria que “eso ya pasó en Colombia en el marco de los procesos de Justicia y Paz frente a los paramilitares, y esos protocolos de cooperación permitieron que la justicia colombiana siguiera avanzando a pesar de que algunos de los paramilitares hubieran sido extraditados. Es momento de sentarse y buscar protocolos de cooperación judicial”.

Dilema Farc

Y hablando del partido Farc, una alta fuente de esa colectividad política derivada de la guerrilla desmovilizada, le indicó a un periodista de EL NUEVO SIGLO que había un debate amplio en su interior por cuenta de la estrategia que se implementará de cara a los comicios regionales y locales de octubre próximo. Para algunos dirigentes de los “comunes”, el partido no se puede exponer a un fiasco electoral como el del año pasado en los comicios parlamentarios, en donde la lista al Senado no llegó ni a 100 mil votos a nivel nacional (aunque ya desde el acuerdo de paz tenían asegurados 10 escaños en ambas cámaras legislativas). De esta forma, para varios dirigentes del partido Farc es mejor apostar por “poco pero seguro” que lanzar muchos candidatos a alcaldías, concejos y asambleas que terminen pasando vergüenzas en las urnas.

Congreso y Venezuela

La próxima semana se reinicia el trabajo en el Congreso al comenzar las sesiones extraordinarias citadas por el gobierno Duque para la discusión del proyecto de ley sobre el Plan Nacional de Desarrollo. Los congresistas del bloque de la oposición ya anunciaron que pedirán la convocatoria urgente de un debate de control político para analizar la postura y acciones del gobierno Duque frente a la crisis política en Venezuela, sobre todo el haber reconocido al gobierno interino de Juan Guaidó. Sin embargo, un congresista del Centro Democrático le indicó a un periodista de EL NUEVO SIGLO que los parlamentarios de la oposición deberían echarle una “leída a la Ley Quinta (Reglamento interno del Congreso)” en torno a lo que se puede y no hacer en las sesiones extraordinarias. “El temario es exclusivo y las posturas sobre los distintos temas quedan a título de constancias y proposiciones… Debates agendados, solo para las ordinarias”, indicó.