Duque y la elección de Contralor
¿Qué rol jugó el presidente Iván Duque en el accidentado proceso de elección de nuevo contralor general? ¿Por qué José Félix Lafaurie no fue el escogido? Son muchas las hipótesis al respecto. Sin embargo, según conoció EL NUEVO SIGLO en fuentes cercanas al hoy Presidente de Fedegán, el Mandatario siempre estuvo informado del proceso. Es más, Lafaurie tuvo oportunidad de hablarle al respecto el 19 de junio, es decir dos días después de la elección de Duque, y este se habría mostrado interesado en apoyarlo, aunque aclarando que había que esperar las etapas de la convocatoria y que se oficializara dentro de ese proceso su condición de candidato. Luego se volvieron a encontrar -según las mismas fuentes- en dos o tres oportunidades más, una de ellas el día que Duque recibió la credencial presidencial, y allí este le preguntó cómo iba la candidatura. La última fue el 6 de agosto, un día antes de la posesión del Jefe de Estado.
Reunión en Palacio
Según las mismas fuentes, el lunes 13 de agosto, durante la posesión en la Casa de Nariño del viceministro del interior Juan Manuel Daza y otros funcionarios del Gobierno nacional, Lafaurie le pidió a Duque un espacio para hablar con él y este lo atendió en su despacho, en presencia de la ministra del interior Nancy Patricia Gutiérrez, el secretario general de la Presidencia Jorge Mario Eastman, el alto consejero Jaime Amín y María Paula Duque. Según las fuentes consultadas, Duque le había dicho a Lafaurie que si quedaba seleccionado entre los diez candidatos que irían a la recta final de la elección en la plenaria del Congreso, el gobierno actuaría automáticamente.
“Fuego amigo”
Sin embargo, fue allí cuando el llamado “fuego amigo” contra Lafaurie aumentó. La misma noche de ese lunes 13 de agosto, cuando la comisión accidental del Congreso se disponía a escoger a los diez finalistas, la senadora uribista Paloma Valencia impulsó un procedimiento mediante el cual los nombres que más se repitieran en la votación por parte de los 21 parlamentarios comisionados serían los candidatos seleccionados. Para los cercanos a Lafaurie este sistema no le convenía a este porque en una comisión integrada por las distintas bancadas del Congreso, las de izquierda (Farc, Alianza Verde, Decentes y Polo) nunca iban a votar por el aspirante del Centro Democrático. Por eso Lafaurie solo obtuvo 13 votos, que aun así le alcanzaron para entrar en la lista de diez finalistas.
Ganó en la bancada
De acuerdo con las fuentes consultadas, según lo hablado con Duque y el expresidente Uribe, se esperaba entonces que el Centro Democrático oficializara el apoyo a Lafaurie ese mismo lunes o el martes. Sin embargo, solo el miércoles en la noche Uribe convocó a junta de parlamentarios del CD y se votó al respecto. El resultado solo se dio a conocer al mediodía del jueves, cuando Nubia Stella Martínez, directora ejecutiva de partido, indicó que Lafaurie obtuvo 33 de los 44 votos posibles. Uribe procedió entonces a reuniones con otros partidos en busca de apoyo al candidato, incluso con conservadores, Cambio Radical y hasta con Duque. Pero fue allí cuando el Jefe de Estado manifestó la tesis de que él no quería “ni un contralor de bolsillo ni un contralor obstruccionista”. Se marginó, entonces, del proceso.
Entonces…
Esa tesis, según las fuentes consultadas, estaba en la misma orilla de la que venía exponiendo de manera reiterada la senadora Valencia, en el sentido de que el Gobierno no podía intervenir en el proceso de elección del Contralor porque eso significaba que, después, toda la coalición de amigos del Ejecutivo iba a ‘ordeñarlo’ con puestos y, en consecuencia, esa situación era abiertamente inconveniente para el presidente Duque. Lo cierto es que el Presidente de la República no intervino en la elección de Carlos Felipe Córdoba como Contralor y Lafaurie así lo ha reconocido en distintas entrevistas esta semana. Sin embargo, sí ha insistido en que fue muy duro el “fuego amigo” en su contra al interior del Centro Democrático y que esperaba que la baja votación de la bancada uribista a su favor no tuviera que ver con ofrecimientos de puestos en la Contraloría.