Dentro de los análisis que se han venido realizado en las campañas de Iván Duque y Gustavo Petro sobre lo que puede pasar el próximo 17 de junio, cuando se vote en la segunda y definitiva vuelta, uno de los temas que más preocupa es el relativo a los partidos del Mundial que se juegan ese domingo: a primera hora estarán compitiendo Costa Rica y Serbia, un cotejo que a primera vista no suena muy atractivo y poco incidiría en la votación. Esto porque empieza a las siete de la mañana y culminaría sobre las nueve. Como en Colombia poco se madruga a votar, entonces no hay mucho problema.
Partidos atractivos
Sin embargo, sobre las 10 de la mañana de ese domingo 17 de junio sí hay un partido que es muy importante: la selección campeona del mundo y favorita a repetir título, Alemania, se mide al combinado mexicano, que dirige el técnico colombiano Juan Carlos Osorio. Es claro que ese partido partirá en dos la jornada electoral y no pocos compatriotas estarán haciéndole fuerza al equipo manito para que dé la sorpresa. Y la cuestión se pondrá más complicada, porque a la una de la tarde saltarán al campo la Brasil de Neymar, otra de las favoritas al título, para enfrentar a la sorprendente Suiza, sin duda uno de los equipos llamados a ser sorpresa en el mundial ruso.
A sufragar temprano
¿Qué hacer para que el fútbol no distraiga a los colombianos de asistir a las urnas? Esa es la pregunta que se están haciendo en los cuarteles de campaña. Una solución, según le contó a EL NUEVO SIGLO un dirigente petrista, es invitar a los colombianos a que voten lo más temprano posible y luego, ya con el deber ciudadano cumplido, entonces sí se dediquen a disfrutar del fútbol. Es claro que esperar a que termine el último partido es riesgo, ya que el pitazo final sería sobre las casi tres de la tarde y entonces habría que correr al puesto de votación, con el peligro de que muchas personas hagan lo mismo y buena parte se quede sin votar, porque a las cuatro cierran las mesas. Obviamente está descartada cualquier posibilidad de ampliar el horario de votación, como en algunas ocasiones se ha propuesto fallidamente.
Consulta al tablero
Hoy está citada la plenaria del Senado para cumplir el trámite de la autorización que debe dar esa corporación legislativa para convocar la consulta popular anticorrupción. Como se recuerda, hay un pacto político entre todas las bancadas para que se le dé vía libre a este mecanismo de participación popular pese a que varios congresistas consideran que varios de los puntos y reformas que quieren someterse a las urnas ya están vigentes en la legislación pero no se aplican de forma correcta o con la suficiente drasticidad. Así las cosas, incluso por encima del clima de polarización que se deriva de la recta final de la campaña presidencial, se espera que la plenaria vote mayoritariamente a favor de la convocatoria y antes de dos o tres meses se lleve a cabo la respectiva cita en las urnas.
Muchos candidatos
Las especulaciones en torno a quién podría ser el primer presidente del Senado están a la orden del día. En las toldas uribistas se insiste en que si Duque llega a la Casa de Nariño y siendo el Centro Democrático la bancada mayoritaria (19 escaños) le podría corresponder dicha dignidad nada menos que al propio expresidente Uribe, quien sería el encargado de ponerle la banda presidencial a su pupilo. Otros cálculos sostienen que uno de los más opcionados sería el conservador David Barguil, no sólo por ser una de las mayores votaciones del 11 de marzo, sino porque esa bancada siempre es clave en las coaliciones gobiernistas. También se afirma que Germán Varón, de Cambio Radical, podría tener un alto chance, siendo ese partido la segunda bancada más fuerte. Y claro, no faltan quienes plantean que Antanas Mockus, de los verdes, podría ser un candidato perfecto, como mensaje de rectificación legislativa.