Ni a diez mil votos

Un veterano analista político hizo un comentario bastante curioso respecto al acto político en el que el Partido Liberal, el miércoles pasado, con el expresidente César Gaviria a la cabeza, anunció que la bancada había decidido, con una votación de 39 a favor, dos abstenciones y siete inasistencias, respaldar la candidatura del aspirante presidencial uribista Iván Duque. Según el analista referido, la crisis liberal es tan grave que podría decirse que de los 41 parlamentarios electos que asistieron al acto del miércoles, cada uno no alcanzaba a representar, en promedio, ni siquiera 10.000 votos. Este cálculo en referencia a que el candidato rojo, Humberto de la Calle Lombana, apenas si logró un poco más de 390.000 votos,  el pasado domingo en la debacle electoral liberal.

¿Luna fuera de competencia?

Tras la baja votación que obtuvo Germán Vargas Lleras en la capital del país, algunos sectores liberales ya dan por descartada la viabilidad de una candidatura para la Alcaldía bogotana por parte de exministro David Luna, quien renunció al cargo unas semanas antes de la primera vuelta para impulsar la aspiración del exvicepresidente en la ciudad. Sin embargo, una fuente cercana a Luna le dijo a un periodista de EL  NUEVO SIGLO que este todavía no ha definido su nuevo rumbo político, pero que los sectores liberales que lo quieren sacar del sonajero de candidatos para la Alcaldía lo que hacen es cobrarle que haya apoyado a Vargas Lleras y no a De la Calle, a quien le fue peor  el domingo pasado en la ciudad.

Meta en peligro

En el alto gobierno están preocupados por el aumento del desempleo en los últimos meses y, sobre todo, porque los analistas sostienen que la tasa seguirá creciendo durante el primer semestre, por lo menos hasta que no se despeje la incertidumbre electoral. Según el DANE en abril el porcentaje de desocupación de los colombianos fue de 9,5 por ciento, es decir apenas medio punto por debajo de los dos dígitos. Como se sabe mantener el desempleo inferior al 10 por ciento ha sido uno de los logros económicos que el Ejecutivo más recalca, pero ahora corre el riesgo de que al terminar el mandato se reverse todo y le  entregaría a su sucesor un indicador cercano o incluso por encima de ese techo porcentual.

PND y OCDE (I)

La mayoría de los gremios económicos han calificado como positiva la entrada de Colombia a la OCDE, aunque algunos de sus voceros consideran que la “tarea difícil” le quedó al próximo Gobierno, bajo la tesis de que el nuevo Plan Nacional de Desarrollo, que debe aprobarse en el primer año de mandato, tendrá que adecuarse al cumplimiento de metas e indicadores que exige ese club exclusivo de 36 naciones caracterizado por aplicar las llamadas “buenas prácticas” de políticas públicas. Incluso en el anteproyecto del Presupuesto General dela Nación para 2019, que ya está confeccionando el saliente gobierno, ya está acompasado con esas reglas nuevas del juego, por lo que debe impactar, entonces, la construcción del nuevo Plan de Desarrollo, a cargo del próximo Ejecutivo.

PND y OCDE (II)

“… Un plan de desarrollo ajustado a las reglas de la OCDE es muy distinto a los que se han aplicado en el país en gobiernos recientes, más aún porque significa un rompimiento frente al que se implementó para este segundo mandato de Santos, pues varias de sus metas se modificaron por el camino para poder cumplir los requisitos de los 23 comités de evaluación de la OCDE”, indicó un reconocido empresario y dirigente gremial en miércoles pasado al ver las imágenes del presidente Santos, con una sonrisa de entera satisfacción, firmando en París el acta de ingreso de nuestro país a esa organización.