Poco, poco…

Una alta fuente castrense reveló que, estadísticamente, las Farc están atacando hoy por hoy menos que un año atrás. Y ello no sólo tiene que ver con que las Fuerzas Militares y de Policía han aumentado sus operativos selva y montaña adentro, con el fin de llegar a “las madrigueras” de los guerrilleros, lo que ha redundado en importantes golpes a mandos altos y medios de bloque y frente,  sino también porque se ha detectado que algunas cuadrillas subversivas estarían cuidándose cada vez más de entrar en combate con la Fuerza Pública.

Las razones

¿Cuál es la razón de esa menor disposición al combate e incluso a perpetrar acciones terroristas como hostigamientos, quema de vehículos y bloqueo de vías? Según se afirma en los corrillos de altos oficiales es evidente que muchos mandos medios de las Farc -que ahora se mueven con menos hombres para evitar ser detectados y bombardeados- saben que el proceso de paz que está avanzando en Cuba podría ser definitivo. Es decir, que se cree en esas instancias de estructura subversiva que es posible que en menos de un año se reciba la orden del Secretariado de suspender la acción militar y prepararse para un eventual ingreso a la vida civil.

No arriesgarse

“… Lo que es evidente es que aunque desde la cúpula de la guerrilla se estén enviando insistentes órdenes para que los frentes arrecien sus ataques a la Fuerza Pública y los objetivos civiles, esas órdenes no están siendo acatadas por los mandos medios de los frentes y cuadrillas, quienes saben que es posible que el proceso de paz pueda llegar a algo definitivo y la guerra puede terminar… Bajo esa tesis, muchos de esos combatientes de base, que en las propias Farc se les llama laguerrillerada, se abstienen de arriesgar sus vidas en los ataques y otras acciones, pues no quieren morir cuando es posible que en un año puedan estar disfrutando, como se dice popularmente, de casa, carro y beca…”, precisó un alto militar en diálogo con un periodista de EL NUEVO SIGLO.

Tiro por la…

Ese “apaciguamiento” de algunos frentes y cuadrillas ya estaría desesperando a los cabecillas guerrilleros que están en La Habana y Venezuela, ya que consideran que sólo si demuestran capacidad de ataque militar y desestabilización en Colombia, sería posible que el Estado ceda de una manera más fácil a sus exigencias en la Mesa de Negociación. Incluso, se dice que algunos de los guerrilleros que se han desmovilizado recientemente admitieron que lo hacían para ‘adelantársele’ a la firma de un acuerdo de paz, puesto que hoy hay más beneficios para los subversivos que dejan las armas y no se sabe qué pasará después.

Deserción a Bacrim

La misma fuente castrense trajo a colación que hay un creciente número de subversivos que han desertado en los últimos meses de las Farc, pero no para someterse a las autoridades y reintegrarse a la vida civil, sino para unirse a bandas criminales y cartelitos del narcotráfico regionales, con los que los frentes han venido trabajando desde hace tiempo. Esos subversivos creen que en la vida criminal les irá mejor que en procesos de desmovilización.