Mientras que bajo la batuta del representante a la Cámara, Miguel Gómez Martínez, se continúa con la recolección de firmas para la campaña que promueve la revocatoria del mandato al alcalde Gustavo Petro, en las filas afines a este último también alistan estrategias para hacerle frente a una eventual citación a las urnas que defina si el burgomaestre debe continuar al frente del Palacio Liévano. Se afirma que algunos de los cuadros clave de la campaña que en octubre de 2011 llevó a Petro a imponerse en los comicios, ya están realizando primeras reuniones para analizar cuál sería la estrategia en caso de que la campaña por la revocatoria llegue a las urnas. El fin de semana pasado, las firmas reunidas para tratar de forzar la salida del Alcalde ya se acercaban a las 80 mil.

Movidas polistas (I)

Pensando ya con más cabeza fría y haciendo, como reza el refrán popular, de tripas corazón, en las toldas del Polo empieza a tomar cierta fuerza la tesis que parte del siguiente escenario: es casi imposible poder quitarles las curules a los congresistas ‘rebeldes’ cercanos a Petro; estos últimos tienen muchos obstáculos legales y de tiempo para armar toldo aparte sin pisar la peligrosa orilla de la doble militancia; y la urgencia de la colectividad de las toldas amarillas es asegurar que en los comicios parlamentarios de 2014 se alcance el umbral electoral (que pasará del 2 al 3 por ciento).    

 Movidas polistas (II)

Sobre esa realidad se está empezando a mover la posibilidad de que las directivas del Polo y la llamada bancada de los “progresistas” (conformada por los senadores Luis Carlos Avellaneda y Jorge Guevara) lleguen a una especie de “acuerdo mínimo” que les permita volver a conformar la lista al Senado el próximo año y, sumando los votos de la línea oficialista del partido, más la llamada “disidente”, entonces poder tener más posibilidades de superar el umbral electoral en marzo del próximo año. En dicho acuerdo se contemplaría la eventualidad de pedirle al senador Camilo Romero -también cercano a Petro- que aspire a reelegirse y aplace una posible aspiración a la gobernación de Nariño.

Movidas polistas (III)

Pero el “acuerdo mínimo” en el Polo no solo podría cobijar a los parlamentarios que se consideran de la línea petrista, sino que también incluiría a los de la tendencia comunista. Como se recuerda, el año pasado se presentó un enfrentamiento entre las directivas del Polo y los parlamentarios que se han mostrado cercanos al naciente movimiento “Marcha Patriótica”, otra agrupación política de izquierda que, se dice, tras recoger las firmas requeridas, aspira a presentar listas al Senado y la Cámara el próximo año. Una instancia del Polo llegó a expulsar al Partido Comunista por ese caso, dejando en vilo la pertenencia de los parlamentarios de esa cauda, Gloria Inés Ramírez y Hernando Hernández Tapasco, aunque luego la medida fue suspendida.

Movidas polistas (IV)

Incluso, de acuerdo con una alta fuente del Polo, no sería descartable que se busquen algunos contactos con los cuadros medios de la llamada “Anapo”, que lideraban el alcalde Samuel Moreno y su hermano Iván (ambos presos en la actualidad). Como se sabe, el Polo no quiere saber nada de los Moreno pero hay dirigentes de su movimiento que estarían interesados en seguir perteneciendo al partido, razón por la cual se buscarían acuerdos para concretar esa posibilidad. Todo sea por alcanzar el ‘bendito’ umbral.