Finales de enero. Ese fue el plazo que en La U se dieron como límite máximo para definir la estrategia de la colectividad de cara a la campaña para la Alcaldía de Bogotá. Se sabe que hay tres posturas en el interior del partido. Una se dirige a que lo mejor es optar por un aval a la aspiración del exvicepresidente Angelino Garzón, quien quiérase o no resulta ser la carta más cercana a La U que ha sonado en las encuestas. No hay que olvidar que Garzón ha figurado en los sondeos en el segundo y cuarto lugar. Sin embargo, hay dos peros al respecto. Primero, que el presidente Santos, jefe natural de La U, está muy distanciado de su antigua fórmula en la Casa de Nariño. Y dos, el estado de salud de Angelino genera dudas. Como se sabe, ayer estaba internado en Cali.
Propias toldas
Una segunda postura en La U está en cabeza de quienes sostienen que el candidato a jugar en Bogotá debe salir de las propias toldas, sin necesidad de acudir a readmitir a los ya idos (Garzón renunció al partido en agosto pasado) ni tener que plegarse al resto de aspirantes de la Unidad Nacional. Por lo mismo, quienes así piensan tienen una baraja de cinco nombres que si bien todavía no están en el partidor de precandidaturas ni suenan en las encuestas, se cree que podrían, con varios meses de campaña, tener el chance real de llegar al Palacio Liévano para suceder aGustavo Petro.
Sin el pan y…
Los dirigentes que hacen parte de esa segunda postura parten de un razonamiento básico: a hoy La U no tiene un perfil presidencial sólido que le permita a la colectividad seguir en el poder, con uno de los suyos, en 2018. A ello se suma que el vicepresidente Germán Vargas Lleras es candidato seguro para pelear por la sucesión de Santos. En vista de ello, se considera que el llamado “partido de gobierno” debe jugarse el todo por el todo para quedarse con el segundo cargo de elección popular más importante del país, que es la Alcaldía capitalina. De lo contrario, piensan algunos sectores de La U, el “partido de gobierno”, corre el riesgo de quedarse, como se dice popularmente, sin el pan y sin el queso…
Aspirante de peso
Una tercera corriente en La U es partidaria de que se piense desde ya en apoyar a algunos de los precandidatos de partidos de la Unidad Nacional que han venido sonando en las encuestas o que podrían saltar a la palestra en el primer trimestre. Consideran quienes son partidarios de esta tesis que siendo la aspirante del Polo, Clara López, tan fuerte en los sondeos de preferencias, es necesario apostar por un candidato fuerte que le haga verdadero contrapeso político y electoral a quien, como la exalcaldesa capitalina, ya sacó en mayo pasado, en la contienda presidencial, 500 mil votos a su favor. Por eso piensan que debería convencerse a personas del perfil de Marta Lucía Ramírez o Carlos Fernando Galán y jugarse desde ya todo para que la izquierda no gane por cuarta ocasión en Bogotá.