Muy decepcionado se declaró un importante líder empresarial de la capital del país que venía impulsando la idea de que los gremios más importantes de la ciudad expidieran una especie de documento-compromiso con destino a los numerosos candidatos a la Cámara de Representantes por Bogotá. “… Lo que se quería era que los aspirantes a representar los intereses de la ciudad en el Legislativo se comprometieran con un decálogo de propuestas muy puntuales… Sin embargo, es claro que la campaña está circunscrita a la suerte de Petro”, se quejó el empresario en charla informal con un periodista de EL NUEVO SIGLO.

Ahí están y…

Tras el escándalo la semana pasada por el descubrimiento de una casa fachada de Inteligencia Militar en un céntrico sector de Bogotá, desde donde podrían estarse realizando misiones de espionaje no autorizado, se alcanzó a escuchar en los pasillos del Ministerio de Defensa que podría venirse un revolcón en la cúpula militar. No obstante el rumor fue rápidamente desmentido y se aseguró que la actual línea de mando se mantendrá hasta que termine este Gobierno e, incluso, si es reelecto el presidente Santos podría ir, como mínimo, hasta el final del año.

¿Timochenko denunciará?

Y hablando de este escándalo,  un periodista que indagaba la semana pasada en distintas fuentes judiciales, policiales y castrenses sobre cómo avanzaban las pesquisas a los discos duros y USB incautados en el allanamiento a la casa fachada de Inteligencia castrense, hizo alusión a la denuncia que los negociadores de las Farc hicieron desde Cuba respecto a que esa guerrilla era el principal blanco del presunto espionaje ilegal. “… Eso sería muy grave, por eso invitamos al señor Timochenko a que se acerque a cualquier dependencia de la Fiscalía en el país y ponga la respectiva denuncia”, dijo medio en serio y medio en broma un alto funcionario judicial. ¿Será que el cabecilla subversivo acepta el ‘consejo’?

Otro delito

Un grupo de asesores de un parlamentario, que está en plena campaña de reelección, anda recabando información sobre cuál es el castigo penal que hoy se les impone a quienes practican procedimientos estéticos invasivos sin tener licencia para ello, o sin las condiciones de bioseguridad exigidas. Según trascendió, la idea es evaluar la posibilidad de convertir en tipo penal autónomo esta clase de  conductas, pues casi a diario se presentan tragedias de personas que en consultorios clandestinos o de fachada son sometidas a procedimientos estéticos invasivos que luego terminan en muertes o graves afectaciones de la salud.

Conciencia del riesgo

“… Esta clase de infracciones no pueden ser un agravante penal, sino un delito autónomo pues raya en la tentativa de homicidio ¿Acaso inyectar silicona industrial o aceite de cocina al cuerpo humano no es atentar contra la vida de un paciente? ¿Quién no sabe que esas sustancias o los llamados biopolímeros mal utilizados pueden causar desde infecciones agresivas hasta envenenamientos en la sangre y coágulos mortales? No estamos aquí ante un problema de mala praxis médica o de licencias, sino de poner, de manera consciente, en riesgo de muerte o lesiones graves a los pacientes…”, indicó uno de los asesores parlamentarios que prepara el borrador del proyecto de ley.