Cosecha normativa
Hay toda una cosecha de normatividad laboral bajo la tutela del titular de esa cartera Rafael Pardo. Esta semana pasó a sanción presidencial un proyecto de ley que establece mecanismos de protección para los colombianos que pierdan su empleo. Según se explicó, la nueva norma permitirá disminuir el desempleo y la informalidad así como mitigar las consecuencias de la pérdida de empleo al garantizar por seis meses los aportes a salud y pensión, y un complemento económico a las personas que pierden su trabajo.
Más beneficiados
También la semana pasada se estableció que los trabajadores independientes que laboren en actividades de alto riesgo y las personas vinculadas a través de un contrato formal de prestación de servicios, deberán estar afiliadas al Sistema General de Riesgos Laborales. Igualmente días atrás entró en vigencia una norma que establece que todos los trabajadores del servicio doméstico tendrán que ser vinculados a las cajas de Compensación Familiar. También podrán acceder a todos los beneficios y derechos que reconoce el Sistema de Subsidio Familiar, siempre y cuando cumpla con los distintos requisitos exigidos, entre ellos, laborar al menos 96 horas de trabajo al mes.
BEPS y subsidios
A todo lo anterior debe sumarse que entraron en vigencia hace pocas semanas los llamados Beneficios Económicos Periódicos (BEPS), diseñados por el Gobierno Nacional para que siete millones de trabajadores colombianos que ganan menos de un salario mínimo o a quienes sus ingresos no les permiten cotizar para obtener una pensión cuando lleguen a la edad de jubilación, son una realidad. Luego se creó unsubsidio para las personas que dejen de ser madres comunitarias y que no reúnan los requisitos para acceder a una pensión, ni son beneficiarias de los BEPS.
Reforma embolatada
A ello se suma que el Gobierno sigue dándole las últimas puntadas al proyecto de reforma pensional que presentará al Congreso en próximas semanas. Aunque el Ministerio ha insistido que la propuesta busca ampliar la cobertura para que millones de colombianos tengan acceso a una vejez digna, acabar con la inequidad y propender para que el sistema sea sostenible, lo cierto es que en el Senado y la Cámara consideran que lo mejor es dejar la iniciativa para el segundo semestre, toda vez que ahora el tema grueso y prioritario debe ser el proyecto de reforma a la salud, que ni siquiera ha pasado de primer debate debido a la intensa polémica que genera no sólo en el Legislativo, sino en todo el país.
Proyectos en fila
A todo lo anterior deben sumarse otros proyectos de ley que están en curso. Por ejemplo, no es poca la controversia generada por una iniciativa que ya pasó primer debate en el Senado y que busca revivir el pago de horas extras y nocturnas. Tal como lo informó en su edición de ayer EL NUEVO SIGLO, el Gobierno y los empresarios tratan de frenar la iniciativa, mientras que el Polo y los sindicatos buscan apoyos parlamentarios para sacarla avante. Igualmente ha tenido mucho eco mediático otro proyecto, denominado “Ley José” que busca proteger del riesgo de despido a los esposos de mujeres que estén en estado de embarazo. También hay otras iniciativas relacionadas con el impacto de los TLC en el mercado laboral, reformas al Código Sustantivo del Trabajo y los debates en torno de si efectivamente las llamadas “cooperativas de trabajo”, que tercerizan la contratación de personal, efectivamente desaparecieron.