En el alto Gobierno se escuchan voces según las cuales ya llegó el momento de ponerles un tatequieto a las acusaciones que desde las orillas uribistas se hacen a diario contra el Ejecutivo y la persona del Presidente de la República. Crece el número de altos funcionarios que considera que algunas de esas críticas de reconocidos uribistas ya sobrepasan el umbral de la controversia política normal y entran en los linderos de la injuria y la calumnia agravadas, razón por la cual es necesario llevar el tema a la Fiscalía para que tome cartas en el asunto, así como hizo el expresidente Uribe que denunció al exministro y exembajador Gabriel Silva por afirmaciones de este último en su columna editorial.
Todos quietos
Y hablando del uribismo, los rumores en los últimos días en torno de que habría cambios en los primeros 15 renglones de la lista al Senado que encabeza el exmandatario, no tendrían mayor piso real. Por lo menos así lo indicó una alta fuente del Centro Democrático, según el cual “aquí hubo una guerra de rumores que no sabemos el origen, pero creemos es más externo que interno…”. Agregó la fuente que está “requeteconfirmado” que José Obdulio Gaviria estará en la casilla ocho y los roces entre él y el hoy candidato presidencial Óscar Iván Zuluaga ya quedaron en el pasado. Como se recuerda, este último alcanzó a pedirle al exasesor presidencial que diera un paso al costado.
Podría ir
La decisión de que el presidente Santos no sea invitado a la convención del Partido Conservador al final de enero, que fue anunciada el martes por el presidente del Directorio de la colectividad, el exsenador Omar Yepes, sería revisada a fondo. Según conoció EL NUEVO SIGLO el grueso de la bancada parlamentaria pedirá la revisión de esa directriz e insistirán en que Santos, así como asistió a los cónclaves de La U y los liberales, también se haga presente en la convención conservadora. Es más, varios senadores ya hablan de que el partido quedaría en desventaja frente a otras colectividades de la Unidad Nacional y hasta se ha planteado que se empiece a revisar la posibilidad de ajustes a los estatutos del Partido.
No hubo éxodo
A propósito de las versiones que circulan acerca de que varios altos funcionarios presentarían renuncia antes del lunes, con el fin de no inhabilitar a sus familiares que se postularán al Congreso, en los pasillos de la Casa de Nariño se asegura que no hay ningún alud de dimisiones. Y, contrario a lo que se pensaba a mitad de año, cuando se creía que serían varios los embajadores que renunciarían para lanzarse a la política, al final de cuentas esto no pasó. Tampoco se ve a exministros en las listas al Senado, pues Germán Vargas Lleras, que dio el paso al costado justo a tiempo para no inhabilitarse, está en la Fundación Buen Gobierno.