Competencia cruzada (I) | El Nuevo Siglo
Sábado, 14 de Diciembre de 2013

En los pasillos del Consejo de Estado no se habla de nada distinto a los procesos que ese alto tribunal deberá asumir como juez disciplinario del procurador Alejandro Ordóñez. De entrada esa competencia significa un cambio, pues en el primer período como jefe del Ministerio Público el Consejo de Estado fue el que postuló en la terna a Ordóñez (que había sido magistrado de esa alta corte), por lo que le correspondió a la Corte Suprema de Justicia ejercer como disciplinario del Procurador.

 

Competencia cruzada (II)

 

Como se sabe, el Procurador General es elegido por el Senado de una terna de candidatos que proyectan el Presidente de la República, la Corte Suprema de Justicia y el Consejo de Estado. Si el elegido es el postulado por alguna de las dos cortes, entonces cualquier queja de orden disciplinario que surja contra el Procurador debe ser conocida por el alto tribunal que no proyectó el respectivo nombre. No hay que olvidar que en su primer período como jefe del Ministerio Público, Ordóñez fue postulado por el Consejo de Estado y quien lo vigiló fue la Suprema. Para su segundo período, ésta fue la que lo candidatizó y, entonces, le corresponde al Consejo de Estado la supervisión disciplinaria. Y también allí, por ser el máximo tribunal de lo contencioso-administrativo, deberán asumirse todas las demandas contra las decisiones que tome la Procuraduría, tal como lo señala el ordenamiento legal y constitucional.

 

Queja roja

 

Se afirma en altas fuentes del Partido Liberal que algunos senadores y representantes han mostrado sus reservas porque la colectividad se ha mantenido muy pasiva frente a la crisis generada por la decisión del procurador Ordóñez de ordenar la destitución del alcalde Gustavo Petro y la resistencia de éste a aceptar el fallo. Para algunos congresistas, el liberalismo no se puede quedar en el congelador en medio de toda la polémica y debe asumir una postura más enfática, “sea cual sea”, precisó un parlamentario liberal, que habló con un periodista de EL NUEVO SIGLO.

 

Pinzón solito

 

En los estamentos castrenses hay coincidencia en torno de que la vocería del ministro Juan Carlos Pinzón en temas de orden público y postura frente al proceso de paz debe mantenerse sin cambio. Esto frente a algunas voces de exaltos mandos que piden a la cúpula militar y policial que sean más activos en los pronunciamientos sobre lo que está pasando en La Habana y sus implicaciones en Colombia. La sugerencia no ha tenido eco en los altos mandos.