Muy molestos se encuentran en mandos medios de las toldas del Polo Democrático por lo que consideran “canibalismo interno” en la colectividad a raíz de las decisiones tomadas por varios de sus más connotados líderes en medio de la campaña presidencial. Para varios dirigentes regionales es urgente que en la cúpula apliquen ese viejo refrán popular según el cual “la ropa sucia se lava en casa”. Es más se considera que los tras los enfrentamientos entre líderes como Clara López, Jorge Enrique Robledo y otros senadores lo que hay es una evidente estrategia de las distintas corrientes polistas respecto de quien deberá manejar la colectividad de cara a los comicios de alcaldes y gobernadores del próximo año, e incluso un tempranero pulso por los perfiles presidenciales en 2018 ¿Será?

¿Demanda a la vista?

Los comerciantes en casi todo el país no se encuentran para nada satisfechos con las decisiones tomadas por no pocos alcaldes en torno de implantar la ley seca durante las celebracioneslos días en que juega la Selección Colombia en el Mundial. Hasta ahí no hay nada nuevo. Lo que sí es sorpresivo es que algunos de ellos ya han consultado con expertos abogados la posibilidad de imponer demandas contra esas administraciones municipales y distritales bajo la tesis de que las restricciones a las ventas de licor los afectaron económicamente en forma grave, sobre todo a quienes hicieron inversiones en materia de infraestructura, televisores y otros servicios para atender a la clientela durante las jornadas mundialistas. Aunque parezca extraño, hay juristas que consideran que existen antecedentes jurisprudenciales, sobre todo en el Consejo de Estado, que podrían darles a los comerciantes algo de razón. Habrá que esperar qué pasa…

Nada de nada…

Una alta fuente de la Casa de Nariño indicó que los rumores que andan circulando acerca de que el presidente Santos ya tendría fecha para la crisis ministerial no son ciertos. Como tampoco lo serían las versiones en torno de que el Jefe de Estado prepara una especie de retiro espiritual con todo su gabinete en el que, durante todo un fin de semana, se haría un balance de gestión cuatrienal y después de ello vendrían los respectivos anuncios sobre cambios en la nómina ministerial. Ni es tan claro, igualmente, que los anuncios sobre cambios ministeriales sean hechos en un solo paquete.

Distanciamiento

En los corrillos políticos se insiste en que las relaciones entre el Gobierno y el procurador Alejandro Ordóñezno están en su mejor momento, y que ello se ha reflejado en un distanciamiento que es cada día más evidente, razón por la cual dirigentes cercanos a la Casa de Nariño y al ente de control disciplinario están ambientando una distensión. Sin embargo, la cuestión no parece nada fácil pues en la coalición gubernamental hay dirigentes partidistas y congresistas que consideran que la Procuraduría no fue imparcial en medio de la contienda presidencial. Lo cierto es que en los pasillos del Palacio de Justicia se dice en voz baja que mientras Procuraduría y Casa de Nariño mantengan frías sus relaciones, ello impactará desde la selección de magistrados hasta la confección de ternas para distintos altos cargos ¿Será?