La Registraduría Distrital del Estado Civil confirmó ayer que de cada cien participantes en la jornada electoral, 32 votaron por Gustavo Petro a fin de hacerlo alcalde de Bogotá y 68 pisaron arenas diferentes de oposición manifiesta. Sufragaron por Petro 719.684 ciudadanos, cifra interior en 180.316 a los 900.000 que cuatro años antes lo hicieron por Samuel Moreno Rojas. De 45 concejales, ocho denominados “progresistas” y cuatro leales al Polo Democrático, en total 12, le cooperarían a la nueva administración distrital desde el Cabildo. El Polo perdió siete curules. Con minoría en el Cabildo, Petro deberá enmendar los errores y abusos cometidos en los últimos ocho años por copartidarios suyos del Polo Democrático.
Doble derrota
Anteayer el Conservatismo y el ex presidente Álvaro Uribe Vélez padecieron una doble derrota. Los candidatos a la Alcaldía de Medellín y la Gobernación de Antioquia, que ambos postularon, fueron vencidos, en su orden, por Aníbal Gaviria y Sergio Fajardo. A estos mismos personajes se enfrentó el Conservatismo queriendo ver elegidos gobernador a Álvaro Vásquez y alcalde a Luis Pérez Gutiérrez. El actual alcalde Alonso Salazar impulsó una campaña de contumelias y falsas acusaciones contra Pérez Gutiérrez.
Tiempo asustador
El Congreso, al reanudar hoy labores tendrá en cuenta que solo le faltan 46 días solares para finalizar este año legislativo. Aunque Senadores y Representantes pueden brindar testimonio, incluso bajo juramento, sobre el intenso trabajo ejecutado, prevalece la tendencia a imaginar a los legisladores en permanente ociosidad. Este clima adverso ha sido estimulado, según se rumora, en el edificio del Congreso por la señora Gilma Jiménez, con su monotema insoluto sobre implantación de la cadena perpetua contra los depravados sexuales.