Los países del G20 urgieron a Estados Unidos a ratificar la reforma del Fondo Monetario Internacional (FMI), bloqueada en el Congreso estadounidense, y sugirieron que encontrarían otra alternativa si Washington no logra hacerlo antes de fin de año.
"La implementación de las reformas de 2010 continúa siendo nuestra prioridad más alta y urgimos a Estados Unidos a ratificar estas reformas cuanto antes", escribieron en su comunicado final los ministros de Finanzas del G20 tras dos jornadas de reunión en Washington.
La reforma -que necesita la luz verde del Congreso estadounidense- aumenta los recursos permanentes del FMI y refuerza el poder de los países emergentes en la institución.
El grupo conformado por 20 potencias económicas mundiales pedirá al Fondo que elabore un plan alternativo "si las reformas de 2010 no son ratificadas para fin de año", escribieron los ministros, al manifestar su profunda "decepción" por el retraso que llevan.
En primera instancia, la reforma fue apoyada con vehemencia por Estados Unidos, el mayor contribuyente del Fondo. Sin embargo, su implementación se ha visto supeditada a las batallas políticas del Congreso.