Después de que algunos integrantes de la bancada de gobierno en el Concejo de Bogotá denunciaran supuestos actos de corrupción en las alcaldías locales, los mandatarios rechazaron las versiones.
En un comunicado, los 20 mandatarios indican “intereses oscuros que a través de rumores y del montaje de artimañas antidemocráticas buscan empañar y enlodar nuestros nombres”.
“Ante cualquier tipo de insinuación, presión o manipulación de la información”, dijeron, “exigimos se nos respete el derecho al buen nombre y al debido proceso”.
“Los rumores buscan desestabilizar el ejercicio político de 20 líderes nombrados sin ningún tipo de prebenda política. Reafirmamos ante los ciudadanos nuestro compromiso por un ejercicio transparente en la inversión de los recursos y sin prácticas clientelistas”, manifestaron.
Como consecuencia de la baja ejecución presupuestal en las alcaldías, principalmente debido a la deteriorada malla vial de Bogotá, quedó en entredicho la gestión de los mandatarios locales y se conoció la intención del Distrito de solicitarles su renuncia con el fin de permitir los cambios internos que pretende hacer Gustavo Petro.
Se conoció que están abiertas 5 investigaciones a los alcaldes, quienes presuntamente estarían beneficiando los intereses de constructores y propietarios de bares, al desconocer competencias para hacer operativos.