¿Qué hacer con las bandas criminales? | El Nuevo Siglo
Martes, 5 de Abril de 2016

El paro armado que desarrolló el denominado Clan Úsuga la semana anterior por tres días y que paralizó buena parte de las actividades del comercio, transporte y colegios en siete departamentos dejó ver una cara más del fenómeno de las bandas criminales, que cada día preocupa más al país porque sigue creciendo y ahora llega a retar al Estado con acciones de este tipo en un intento por demostrar poder en un aparente intento de precipitar una negociación con la administración Santos sometiéndose a la justicia a cambios de beneficios penales especiales.

 

En ese escenario es necesario que se fortalezca y reoriente la lucha contra este fenómeno delincuencial, entendiendo que son bandas criminales organizadas con un importante tamaño en número de  hombres y armamento incluso de guerra. Así lo consideran ex ministros de Justicia, ex viceministros de Justicia, ex fiscales y ex vicefiscales consultados por EL NUEVO SIGLO.

 

Entre las medidas que estos ex funcionarios considera se requieren, hablan desde promover la denuncia ciudadana hasta permitir que el Ejército entre a combatir a estas organizaciones.

 

El exministro de Justicia Parmenio Cuéllar, dijo que el problema de las Bacrim es muy delicado hoy porque no se trata de la delincuencia común de antes sino que, como se vio con el precedente de Pablo Escobar, enfrentan al Estado. Ahora el Clan Úsuga no se ha limitado a sus actividades criminales  sino “que  hicieron algo que es más de la delincuencia política, hacer un paro armado contra el Estado, desconocerlo”, dijo.

 

Entonces, añadió, “hay un reto que no se puede combatir con el pensamiento que se tenía antes. Por eso propuse en un proyecto que se hundió, crear la Policía Militar, que fuera capaz de hacer más que la fuerza pública que contiene el delito”.  Ir hacia una forma diferente de combatir este fenómeno “utilizando todos los medios”.

 

Añadió que la situación es distinta, “el Congreso tiene que entender eso para expedir una nueva ley sobre el particular”. 

 

Por su parte el exministro de Justicia y exfiscal Alfonso Gómez, dijo que es “necesario aplicar toda la fuerza del Estado porque se trata de organizaciones delincuenciales, pero no es una delincuencia simple, creo que conservan algunos elementos del fenómeno paramilitar. Y creo que si el estado unido bajo la dirección del Presidente, con todas sus Fuerzas Militares y de Policía no enfrenta con toda la certeza necesaria este fenómeno, pues va a afectar seriamente el proceso de paz”.

 

Gómez rememoró que en la época de la presidencia de Virgilio Barco cuando surgía el paramilitarismo en el Magdalena Medio, “creó un ente que se llama el cuerpo especial armado con el objetivo específico de combatir estas organizaciones criminales que evidentemente tienen una gran capacidad de daño, pero que no pueden estar por encima del Estado ni vencerlo”.

 

Frente a bombardear a las bandas criminales como algunos han solicitado, Gómez dijo que “en cierta forma autorizar los bombardeos implicaría darle un cierto estatus político que no tienen, y lo primero que hay que saber es dónde están. Los bombardeos es si están ubicados en las montañas. Creo que esa es más una labor básicamente de Policía que se puede hacer con una gran labor de inteligencia sin necesidad de los bombardeos”.

Mientras que el exfiscal Alfonso Valdivieso dijo que “las Bacrim solo puede enfrentárselas de manera muy drástica por la vía de la persecución judicial y desde luego la vía de la acción armada”.

Añadió que se trata de organizaciones “que desde ningún punto de vida pueden ser tratadas con procesos de negociación”.

El exfiscal Valdivieso consideró también que si las bandas criminales “desbordan la capacidad de acción de la fuerza de la Policía en determinadas áreas, el Ejército debe ser una alternativa para enfrentarlas”.

 

A destiempo

El exviceministro de Justicia Guillermo Reyes González, dijo que  lo que ocurrió el viernes y el sábado pasado en varios departamentos, especialmente en Córdoba, “sigue demostrándoles al país y al Gobierno que amerita un tratamiento urgente y definitivo. Creo que las decisiones que se han venido tomando, pues no han sido tan efectivas como se muestra, cada día crece más, cada día son más fuertes, cada día intimidan más a la población. Creo que el hecho de que haya esa cantidad de hombres persiguiendo al Clan Úsuga es importante, pero los resultados no se ven”.

 

Por ello, Reyes dijo que el Gobierno “tiene que pensar en medidas mucho más radicales con estos grupos que están haciendo mucho daño y van a afectar el proceso de paz”.

 

En este sentido, Reyes dijo que con los bombardeos no se soluciona la influencia que tiene el Clan Úsuga, por ejemplo, en Montería. “Creo que esto amerita decisiones muy radicales en materia de la Fiscalía, la Policía, el Ejército. Creo que la población también tiene que ser muy dura en denunciar en dónde están presentes”.

 

Destacó la presencia del presidente Santos y la cúpula militar la semana pasada en Montería en pleno paro armado decretado por el clan Úsuga, “pero creo que hay que hacerlo a nivel nacional y con decisiones que la población también pueda ser parte en la denuncia, en pensar en más beneficios por colaboración a quienes denuncien a estos bandidos”.

 

Mientras que el exviceministro de Justicia, Rafael Nieto Loaiza, dijo que “lo primero que sorprende es que al Gobierno lo cojan con los pantalones abajo después de seis años de la administración Santos”.

 

Añadió que lo que ocurrió con el paro armado del Clan Úsuga llama a preguntarse si el Ministerio de Defensa bajó la guardia, no se le está dando la debida importancia a las Bacrim, hay una disminución en la moral de la Fuerza Pública por la crisis de la Policía y por los procesos de paz o que “la gestión de liderazgo al interior del Ministerio de Defensa afecta de manera grave la actuación de la Fuerza Pública”.