La ilusión de volver a ver al Falcao García que llegó a ser considerado por algunos como el mejor goleador del mundo, cada vez se retrasa más por cuenta de su infortunio con las lesiones.
En los últimos dos años han sido pocos los partidos que ha podido disputar el artillero samario, aunque en su regreso al Mónaco ilusionó y hasta llegó a ser “bloqueado” por el técnico José Pekerman para convocarlo a la Selección Colombia, lo que no pudo suceder, esta vez, por un golpe en la cabeza.
La esperanza de que el Tigre recupere es mayor habida cuenta de la carencia de gol en el combinado patrio en las eliminatorias.
Colombia ha marcado pero no a través de sus delanteros Carlos Bacca o Luis Fernando Muriel, sino de sus volantes.
A la ausencia de Falcao se sumó la de Teo Gutiérrez, quien cumple una doble función, arrancando desde atrás, abriendo espacio, juntándose con el volante creativo para surtir de balones al hombre en punta, tarea que también cumplió en algún momento el artillero al servicio del Mónaco de Francia.
García es uno de los jugadores más queridos por la afición, que también esperan ansiosos su regreso a la Selección, pero las consecuencias de apurarlo para que llegara al Mundial de Brasil tras la operación de rodilla, se han hecho sentir y para colmo de males, ahora se sumó a ello, justo cuando estaba mostrando un buen nivel, un fuerte golpe en la cabeza.
En principio, cuando el jugador anunció que regresaba a entrenamientos se pensó que su ausencia de las canchas era cuestión de días, pero pasan las semanas y nada.
El jueves pasado fue sometido a un examen por parte de los médicos del club, luego de lo cual no se le dio de alta.
Ahora el Mónaco anunció que desconoce si podrá contar con su atacante mañana ante el Montpellier porque el jugador debe pasar exámenes médicos hoy, según señaló ayer el entrenador del equipo Leonardo Jardim.
“No sé, debe pasar exámenes médicos”, respondió Jardim en rueda de prensa sobre la presencia del Tigre en la décima jornada de la Ligue 1.
Falcao sufrió una conmoción cerebral en la derrota ante el Niza (0-4) el 21 de septiembre, en un choque con el arquero Yoan Cardinale, por lo que tuvo que ser sustituido al descanso.
El colombiano no disputa un partido desde entonces pero ya se entrena con sus compañeros.
Es normal que los médicos quieran tener cuidado y cerciorarse de la recuperación plena del artillero y que el técnico no quiera apurarlo a pesar de que lo considera un jugador fundamental en la estructura de su elenco.
Pero han surgido dudas ante los escuetos comunicados del Mónaco y el paso del tiempo las aumenta. ¿Será que hay algo que no se ha hecho público? O ¿Será solo precaución?
Hoy se podrían tener luces, pero sí preocupa que el Tigre siga entrenando por aparte.