El jefe máximo de la guerrilla de las Farc exigió que el Estado colombiano responda por la muerte de su predecesor, abatido durante una operación militar en 2011, en una carta abierta publicada el martes.
El número uno de las Farc, Timoleón Jiménez, alias "Timochenko", dijo que las autoridades no respetaron la ley en el operativo en el que el exlíder de la rebelión marxista Alfonso Cano fue asesinado.
"Alfonso Cano debió haber sido capturado y entregado a los jueces para ser sometido a una causa penal con arreglo a las leyes", dijo "Timochenko", cuyo grupo negocia desde noviembre de 2012 en Cuba un fin al conflicto armado con el gobierno.
En el operativo en el cual fue abatido Cano, el 4 de noviembre de 2011 en el departamento de Cauca, las tropas localizaron al líder guerrillero en un momento en que estaba solo y "se hallaba en absoluto estado de indefensión", agregó "Timochenko" en la carta publicada en el sitio web Paz FARC-EP.
El jefe de las Farc, que no participa en las conversaciones en Cuba, dijo que el presidente Juan Manuel Santos y sus asesores debieron tomar en cuenta la Convención Americana de Derechos Humanos y señaló que allí sólo se admite "la pena de muerte como consecuencia de una sentencia judicial debidamente ejecutoriada".
Cano, quien había asumido el liderazgo de las Farc a la muerte del fundador y entonces máximo jefe del grupo rebelde, Manuel Marulanda, alias "Tirofijo", en mayo de 2008, ya había iniciado en el momento de ser abatido contactos con el gobierno colombiano para acordar un fin al conflicto armado interno, según reveló Santos en 2012.
En abril pasado Santos dijo que "lo pensaría dos veces" antes de tomar la decisión de abatir al líder de la guerrilla.
El 12 de agosto está programado que comience en La Habana un nuevo ciclo de conversaciones entre las Farc y el gobierno sobre el tema de las víctimas, tras alcanzarse acuerdo en tres puntos de la agenda, el problema agrario, la participación política de la guerrilla y las drogas ilícitas.
La discusión sobre las víctimas se perfila como un punto difícil y ya ha generado un debate nacional en Colombia, donde el conflicto armado que comenzó hace 50 años, y en el que han participado guerrillas de izquierda, paramilitares de derecha, bandas de narcotraficantes y agentes del Estado, ha provocado cientos de miles de muertos y cinco millones de desplazados.
"De este y los innumerables crímenes sucedidos en este país habrá que tratar en los debates que sobre el tema de víctimas se iniciará próximamente en La Habana", dijo "Timochenko", quien finalizó la misiva con la pregunta: "¿Estará Santos dispuesto a responder por su crimen confeso?".