Mientras la  Contraloría de Bogotá denuncia que hay un posible detrimento por 1.613 millones de pesos en la adquisición de prendas correspondientes a los uniformes del proyecto Jornada Escolar 40 Horas Semanales, el Instituto Distrital para la Recreación y el Deporte (IDRD), explicó que no presentan sobrecostos porque se mantuvieron los precios y al contratista no se le pagó ni un solo peso adicional al valor del contrato.

Al tiempo que el IDRDseñala que existe una interventoría externa contratada por concurso de mérito y la cual ha requerido al contratista en varias oportunidades para la entrega de las prendas, el equipo auditor de la Contraloría tomó una muestra de los uniformes de atletismo, baloncesto, fútbol, voleibol, natación, esgrima y taekwondo, entre otros, estableciendo diferencias en precios que llamaron la atención.

Y es que debido al gran volumen de prendas, 80.000 en total, a la personalización del tallaje y a la rotación de estudiantes del programa 40 x 40, atribuye el IDRDla prórroga de los contratos solicitada por los proveedores para la entrega de uniformes del mencionado programa, el cual cobija a menores de 71 colegios inscritos en 26 modalidades deportivas.

Ante la denuncia realizada por la Contraloría de Bogotá, el IDRDaclaró que se suscribieron tres contratos diferentes por valor de 1.255 millones de pesos cada uno, en noviembre de 2013. Estos tres contratos eran para la producción de uniformes para programas como Ciclovía, Pedalea por Bogotá, Recreovía (programa de aeróbicos) y jornada completa 40 horas semanales en deportes.

La ejecución de los mismos arrancó en enero del año pasado el cual trascurrió, primero en la definición de cada alumno del deporte a practicar y segundo en la recolección de los datos individuales de tallaje para realizar medidas personalizadas.

Cabe destacar que cada disciplina requiere un tipo de indumentaria diferente, lo que vuelve más complejo y dispendioso su elaboración. Ejemplo: los uniformes de esgrima tienen un diseño especial, en telas determinadas y con especificaciones técnicas específicas que requieren mayor tiempo de diseño y elaboración.

El Instituto reconoce que existieron demoras para determinar tallas de cada uno de los estudiantes pues estas eran de carácter personalizado, sumado a la cantidad de uniformes (30.000 en total para la jornada completa), y por el alto nivel de rotación de alumnos en los 26 centros de interés de programa los cuales son escogidos por ellos mismos.

El proceso de recopilación de la información del menor, tallas y centro de interés para definir cantidades de prendas, características y tipo de uniforme, concluyó en julio del año pasado.

El contratista que quedó de entregar los uniformes a 31 de diciembre de 2014, solicitó prórroga de tres meses, los cuales se cumplieron a finales de marzo de 2015, aduciendo dificultad de consecución de materias primas y tiempos de producción, pero con entregas parciales a partir del 4 de febrero hasta cumplir con lo pactado.