Pulso por el ascenso del general Patiño | El Nuevo Siglo
Domingo, 9 de Junio de 2013

Continúa la controversia en la Comisión Segunda del Senado por el ascenso del general Francisco Patiño a quien la Fiscalía le habría abierto apenas el 31 de mayo una investigación preliminar por la muerte del grafitero Diego Felipe Becerra.

La senadora Myriam Paredes, del Partido Conservador, ratificará mañana ponencia favorable al ascenso del oficial al grado de mayor general porque tanto la viceministra de Defensa, Diana Quintero, como del subdirector de la Policía Nacional, general Edgar Orlando Vale, reconocieron las altas calidades de Patiño y certificaron que su ascenso fue propuesto luego de cumplido el trámite de selección y filtros establecidos para estos casos como son la junta de evaluación y clasificación de ascensos, la junta de generales y almirantes y la junta asesora compuesta por el ministro de la Defensa Nacional y los generales de la República.

Para Paredes, “el ascenso del general Patiño debe ser aprobado por esta Comisión, pues hace parte de una postulación hecha mediante decreto presidencial luego de un riguroso proceso de selección cumplido al interior del Ministerio de Defensa y por cuanto el general no se encuentra vinculado formalmente a proceso investigativo alguno tal como se dio lectura a la certificación expedida por el fiscal sexto de Bogotá”.

El senador Camilo Romero, del Polo Democrático, explicó que Patiño “no está vinculado formalmente a una investigación pero tiene una en su contra” ya que “fue mencionado por lo menos dos veces en la investigación del encubrimiento del caso. Patiño es mencionado por el conductor del bus, que supuestamente fue atracado y luego resultó en que no, él dice que el oficial le dio bonos de 200.000 pesos para sus hijos. Luego otra persona, el patrullero de la Policía Nacional Jhoan Rolando Soler, asegura que el general Patiño habló dentro del CAI con el señor de la buseta”.

Romero aseguró que su “intención no es dañar la carrera del general, pues respeto su trayectoria y hoja de vida”, pero advirtió que es necesario ponderar las responsabilidades institucionales en un hecho que puede significar un grave comportamiento que debe ser evaluado con detenimiento.