ALGUNAS de las recomendaciones de la comisión de expertos para llevar a cabo una reforma tributaria estructural han sido cuestionadas por varios sectores tanto económicos como políticos, quienes insisten en que esta iniciativa requiere más análisis basado en la realidad fiscal del país.
Aducen, además que no se debe empobrecer más la clase media gravándola con más impuestos.
Entre las propuestas más polémicas se encuentra gravar con un IVA del 5% la mayor parte de la canasta familiar y aumentar hasta en un 30% el impuesto a la gasolina.
También se busca incrementar hasta en un 150% el impuesto a los licores y el tabaco en los próximos tres años y ampliar la base de tributación para que dos millones de colombianos más paguen impuestos como el de renta.
De igual forma se propuso que en el pago del impuesto sobre los dividendos a las empresas, aquellas compañías que tengan inversiones en paraísos fiscales paguen una tarifa plena del 35%.
El senador del partido conservador Fernando Tamayo, dijo a EL NUEVO SIGLO que “el trabajo que ha hecho la comisión de expertos es muy serio, estamos apenas conociéndolo de fondo, lo que me parece importante es gravar el capital y excluir los productos básicos de la canasta familiar de ser gravados, por ahora tenemos que ir analizando cada una de las propuestas”.
¿Mal enfocada?
Entre tanto, el senador del Polo Democrático Jorge Robledo, aseguró que “este es un problema de enfoque general porque las recomendaciones están basadas en el aumento del IVA, en la ampliación de la base gravable y el aumento de la tasa, y esto definitivamente es algo regresivo, porque se pretende cobrarles los impuestos a los más pobres, si a los pobres y a las clases medias las siguen empobreciendo quién le va a comprar al aparato productivo, creo que esto es contraindicado”.
A su vez, el senador del partido de La U Ángel Custodio Cabrera, sostuvo que pese a que no comparte que se graven productos de la canasta familiar le parecen apropiadas las propuestas de los expertos tributarios, según el parlamentario lo que más resalta es que se cambie el sistema de determinar la renta de las empresas basado en las utilidades, reformar la DIAN.
“El IVA hay que incrementarlo pero hay que excluir los artículos de la canasta familiar”.
Las preocupaciones
Como preocupante calificó la senadora del Centro Democrático María del Rosario Guerra, la propuesta de incrementar el IVA: “es preocupante que en la medida que aumenta la tasa de tributación sube la percepción de derroche del gasto público, qué bueno sería hacer más eficiente y transparente el gasto público, cualquier esfuerzo tributario que no genere confianza en la ciudadanía es perdido".
Para la parlamentaria, es irónico pensar en subir el IVA cuando no se ha hecho un esfuerzo por lograr un mayor recaudo: "Vamos a aumentar 3 puntos del IVA cuando no hemos hecho el esfuerzo suficiente para mejorar el recaudo, esto no tiene sentido para la ciudadanía”.
Según Guerra, el estrés tributario está basado en que no se están logrando las metas de recaudo.
"La trampa del ingreso medio también es preocupante pese a que comparto que todos debemos tener conciencia de declarar. Nuestra población está en la clase media vulnerable y este grupo va a recibir de entrada el primer impacto. Mi llamado es al Gobierno para que se piense muy bien antes de poner a tributar a la clase media", puntualizó la senadora.
Poco tiempo
El senador de Cambio Radical Antonio de la Espriella, dijo hace unos días a este diario que el Gobierno debe radicar el proyecto de reforma tributaria el próximo 20 de julio, estudiarla y aprobarla en 45 días, y consideró que sin mayor debate y socialización el resultado no será óptimo.
Frente al incremento de dos puntos del IVA como lo propone la comisión de expertos, el parlamentario manifestó su desacuerdo.
Para el senador del partido de La U Mauricio Lizcano, al igual que los demás parlamentarios, se opone al incremento del IVA, “no estoy de acuerdo en este punto, lo mejor es eliminar las exenciones, ampliar la base gravable y devolverles puntos a los estratos menos favorecidos”.
Más dolores de cabeza
De otra parte, a Fenavi, el gremio de los avicultores, le produce un gran dolor de cabeza el IVA, argumentando, “induciría al empobrecimiento y, desde luego, al deterioro de la calidad de vida de la población de menores ingresos”.
El gremio asegura que gravar la canasta familiar con el tributo, en el caso particular del sector avícola, recaería fuertemente sobre dos productos básicos de la alimentación de los colombianos: el huevo y la carne de pollo.
“El impacto de cambiar la estructura de bienes exentos (en donde ni consumidor y productor pagan impuesto alguno), a gravados con una tarifa de 5 por ciento, terminaría generando un impacto en términos del IVA efectivamente pagado por parte de los consumidores, del 12,8% en el huevo, y de 10,4% en la carne de pollo”.
Igualmente los comerciantes han sido enfáticos en señalar que sería un golpe muy duro para el sector aumentar el IVA.
Todas estas reacciones ya han desencadenado las sugerencias de la Comisión de Expertos Tributarios, para que sean la base del proyecto de ley que se llevará al Congreso en el segundo semestre del año. Sin embargo el Gobierno ha recalcado que hasta el momento no se ha acogido ninguna de estas propuestas sino que están en etapa de análisis.