Los rebeldes prorrusos del este de Ucrania derribaron un helicóptero militar matando a 12 soldados ucranianos, en una de las peores jornadas para las fuerzas leales a Kiev que tratan desde hace casi dos meses de poner fin a la insurrección separatista.

Un misil alcanzó cerca del bastión ruso de Slaviansk el Mi-8 ucraniano que transportaba a hombres destinados a relevar a las tropas y a un general de las fuerzas especiales del ministerio del Interior, aseguró el presidente interino Olexandre Turchinov en el Parlamento.

Turchinov había informado antes acerca de 14 muertos, pero la Guardia Nacional publicó un balance de 12 muertos y un herido grave.

"Estoy convencido de que nuestras fuerzas armadas [...] llevarán hasta el final la limpieza de los terroristas y que los criminales que financia Rusia serán eliminados y se sentarán en el banquillo de los acusados", añadió el presidente interino.

Turchinov dejará su puesto el próximo 7 de junio al presidente electo de Ucrania Petro Poroshenko, quien, según los datos oficiales publicados este jueves, se impuso con un 54,7% de los votos en la elección presidencial del pasado domingo.

El ejército ucraniano afronta una de las peores jornadas desde el inicio a mediados de abril de las operaciones contra los prorrusos del este.

La diplomacia rusa instó por su parte a los occidentales a que presionen a las autoridades ucranianas para que cese la escalada de violencia en el este del país y evitar así una "catástrofe nacional".

- ¿Espías? -

En el terreno, la situación continúa tensa después de la muerte el lunes de cuarenta personas, en su mayoría rebeldes, en la batalla por el control del aeropuerto de Donetsk y de la desaparición el martes de cuatro observadores de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE), que los insurgentes reconocieron tener en su poder.

"Sabemos dónde están, están sanos y salvos", declaró este jueves a Interfax Viacheslav Ponomarev, el "alcalde" de Slaviansk. "Los detuvimos. Vamos a aclarar quiénes son, a dónde iban y para qué y los liberaremos", agregó.

"Se sospecha que serían espías", explicó por su parte Denis Puchilin, uno de los líderes de la "República de Donetsk", citado por la agencia Ria Novosti.

Otro grupo de 11 observadores también fue retenido brevemente el miércoles en la región de Donetsk.

La OSCE calificó la detención de los observadores de "sabotaje a los esfuerzos internacionales" para poner fin a la crisis y a los combates.

Kiev informó por su parte de la muerte de un soldado en un asalto de los separatistas contra una unidad de la región de Lugansk el miércoles por la noche y anunció que tenía un plan de acción para "una limpieza total del territorio ucraniano (...) de los separatistas".

Por su parte, el presidente electo indicó que quería entablar "inmediatamente" negociaciones con Estados Unidos y Europa con vistas a una alianza de defensa para "proteger a Ucrania militarmente", en una entrevista al diario alemán Bild.

Poroshenko dijo estar dispuesto también a reunirse con el presidente ruso, Vladimir Putin.

Los jefes de estado ruso y ucraniano tendrán la oportunidad de conversar en Francia, donde coincidirán el 6 de junio con el presidente estadounidense, Barack Obama, en la conmemoración del 70 aniversario del Desembarco de Normandía.

- Guerra del gas -

Respecto al gas, Ucrania y Rusia se aferran en sus posiciones. Moscú exige el pago de la deuda ucraniana (3.500 millones de dólares) con la compañía estatal rusa Gazprom y el pago por anticipado del suministro de este hidrocarburo ruso para el mes de junio.

Kiev pone como condición la garantía de una reducción en el precio del gas, en estos momentos el más alto de Europa.

Ante la falta de acuerdo, Gazprom podría suspender el martes el suministro, lo que podría afectar a algunos países europeos, quienes intentaron en los últimos días la instauración de una hoja de ruta para evitar esta situación.

Una nueva reunión sobre el suministro del gas ruso a Ucrania tendrá lugar el viernes en Berlín con representantes de Moscú, Kiev y de la Unión Europea.