Las modificaciones que propone la administración al acuerdo de 2005 que aprobó cobrar valorización para realizar obras de infraestructura vial tienen buen ambiente en el Concejo de Bogotá ya que la ciudad tiene un atraso vial superior a las dos décadas.

Los ponentes del proyecto Miguel Uribe, del Partido Liberal, Roger Carrillo, del Partido Conservador, y Clara Lucía Sandoval, de La U, radicaron ponencias positivas con modificaciones.

Entre los cambios propuestos, Uribe plantea que el cobro por las obras de Valorización por Beneficio Local se efectúe una vez estas estén terminadas. “Es necesario un cambio de fondo que permita acabar la costumbre de presentar modificaciones a los plazos para iniciar las obras de las obras de los Grupos 2, 3 y 4 del Acuerdo 180 de 2005 que aún se encuentran pendientes de construir.

En su ponencia, el concejal liberal señala que se debe prevenir que el Instituto de Desarrollo Urbano (IDU) tenga que devolver dineros cobrados por concepto de contribución de valorización por no haber iniciado la construcción de las obras respectivas dentro de los dos años siguientes a la fecha  de expedición del acto que asigna el monto distribuible.

A su turno, Carrillo indica que es necesario recuperar la confianza y la credibilidad en la Administración Distrital de manera que los contribuyentes paguen con agrado por una obra terminada. “Esta prórroga es necesaria para evitar que los bogotanos y la actual Administración deban pagar por problemas que vienen de tiempo atrás. Las obras contempladas en el cobro son indispensables para que la movilidad en Bogotá deje de ser un lastre para el desarrollo”.

El concejal conservador exige a la Administración Distrital adoptar acciones para frenar el incumplimiento en la entrega de las obras. “Se hace indispensable priorizar los gastos y redistribuir los montos, para cumplir tanto con los objetivos de adecuación y construcción de la malla vial, como con las metas de optimización de espacio público”.

Advierte el concejal Carrillo que de no aplicar estas modificaciones es inminente un nuevo golpe al bolsillo de todos los bogotanos. “La dilación y el incumplimiento en el inicio de las obras obligarían a la administración a devolver los recursos recogidos a través del cobro, incluyendo los intereses generados durante estos años, con los respectivos cargos tributarios que esto le significaría al ciudadano”.

El concejal Carrillo exigió freno al incumplimiento. “Esta discusión sobre la prórroga para el cobro y ejecución de obras, que se derivan de la modificación del acuerdo 180 de 2005, no significa que el Concejo otorgue a la administración carta blanca al incumplimiento a los ciudadanos, de hecho le exigen acciones que garanticen que los bogotanos no sigan siendo objeto de dilaciones en la entrega de los trabajos”.

En este mismo sentido, la concejal Sandoval dijo que no se deben cometer los errores de administraciones pasadas, las obras deben obedecer a diseños técnicamente planeados, acordes a los proyectos y metas del presente plan de desarrollo, y diseñadas con base en los nuevos sistemas de movilidad y de transporte masivo que se implementarán en la ciudad.

Así mismo, la concejal de La U señaló que no deben repetirse errores en la asignación de valorización para no tener que devolver los dineros recaudados por este concepto, en perjuicio de la economía y eficacia administrativa y de los propios contribuyentes. “Se debe precisar que los diseños y estudios que por cualquier motivo deban de rehacerse no podrán correr a cargo de esta contribución por valorización sino de las transferencias ordinarias de la entidad correspondiente”.