Programa etiquetado para productos lanza Obama | El Nuevo Siglo
Jueves, 27 de Febrero de 2014

Estados Unidos quiere modificar el etiquetado de los productos alimentarios para reflejar mejor su valor nutritivo y su contenido calórico, una medida presentada el jueves por Michelle Obama, en su lucha contra la obesidad, que afecta a más de un tercio de los estadounidenses.

"Nuestro principio motor es muy simple: queremos que podaís en tanto que padres y consumidores entrar en un supermercado, tomar un producto de una estantería y saber si es bueno para vuestra familia", declaró Michelle Obama, al presentar en la Casa Blanca la medida -que entrará en vigor dentro de al menos dos años- junto a la secretaria de Salud Kathleen Sebelius y la directora de la Administración de Medicamentos y Alimentos (FDA), Margaret Hamburg.

"La verdad es que a menudo es casi imposible obtener las informaciones más elementales sobre los alimentos que compramos para nuestra familia", añadió, juzgando los etiquetados actuales ilegibles y pasados de moda.

"Es simplemente inaceptable, como consumidores y padres tenemos el derecho de comprender qué hay en la alimentación que damos a nuestra familia, puesto que es la única forma de llevar a cabo elecciones informadas", insistió la primera dama.

El nuevo etiquetado elaborado por la FDA afecta a unos 700.000 productos y representa la primera revisión mayor de un sistema inicialmente puesto en marcha en 1994. La puesta al día tiene en cuenta las últimas informaciones científicas referidas a los vínculos entre el régimen alimenticio y las enfermedades crónicas como la obesidad y las patologías cardiovasculares.

Además una nueva línea prevé detallar los "azúcares añadidos" al producto, lo que tiene en cuenta la última guía dietética federal de 2010 según la cual el consumo de azucares, a menudo añadidos por la industria agroalimentaria para la conservación, es excesivo y debería ser reducido.

 US$ 2.000 millones de costos-

El nuevo etiquetado propone sustituir igualmente la descripción superada de las porciones alimentarias y las calorías contenidas en cada paquete para reflejar mejor las cantidades realmente consumidas. Las etiquetas serán también concebidas para destacar informaciones clave como el número de calorías y el tamaño de las porciones.

"Para ser relevante, el nuevo etiquetado de las informaciones nutricionales de la FDA integra los últimos conocimientos científicos en materia de nutrición y de vínculos entre lo que comemos y el desarrollo de enfermedades crónicas graves que afectan a millones de estadounidenses", señaló Margaret Hamburg.

Según Michael Taylor, responsable de productos alimentarios de la FDA, la puesta en marcha de este nuevo etiquetado podría costar unos 2.000 millones de dólares pero los beneficios para la salud podrían alcanzar los 30.000 millones de dólares gracias a las enfermedades que se pueden evitar.

Michelle Obama y el secretario de Agricultura Tom Vilsack anunciaron igualmente el martes la intención del gobierno federal de regular la publicidad de los productos alimenticios en las escuelas. Esta propuesta trata de prohibir en el marco escolar publicidad de alimentos ricos en azúcar y grasas que no respeten la nueva reglamentación federal en materia de nutrición por los productos alimenticios servidos en las cantinas de 100.000 establecimientos públicos del país.

Estados Unidos comienza a marcar algunos tantos en su batalla contra la obesidad y la mala alimentación, especialmente entre los más jóvenes. El organismo federal de los Centros Federal del Control y Prevención de las enfermedades (CDC) anunció este martes una baja espectacular de un 43% de la obesidad entre los niños de 2 a 5 años desde hace 10 años.

La guerra contra la obesidad es una de los caballos de batalla de Michelle Obama desde su llegada a la Casa Blanca en 2009.