Así como William Andrés Cabezas, un joven de unos 25 años, habitante de Ciudad Bolívar, 162 ex pandilleros del programa “jóvenes en Paz” se graduaron en primaria o bachillerato en el marco del cumpleaños de Bogotá.
Para la secretaria Distrital de Gobierno, Gloria Flórez Schneider, el programa “jóvenes en paz” deja resultados concretos hasta el punto que es referente para otras ciudades donde tienen problema de pandillas como factor de violencia. “En Bogotá Humana la educación es un derecho no un privilegio”.
En este sentido, el joven William señaló: “Aquí están los resultados, pero con pesar todavía nos sentimos segregados y sobre nosotros hay un estigma de que todos somos ladrones y viciosos”, señaló.
Del grupo de muchachos y muchachas que entraron al programa de inclusión “jóvenes en paz”, hoy se graduaron 31 en grado once; 85 de grado noveno, 46 alcanzaron el quinto de primaria y 98 más pasaron del grado 10 al 11.
El programa fue desarrollado a través del Instituto Distrital para la Protección de la Niñez y la Juventud (Idipron), con el apoyo de la Secretaría Distrital de Integración Social y la Secretaría de Gobierno que lograron rescatar más de 100 jóvenes de zonas o ‘parches’ en los barrios más afectados y deprimidos por la violencia y la delincuencia de la ciudad.
Según la Secretaria de Gobierno, el día de los grados fue un día muy especial para Bogotá, en el marco de su cumpleaños 477. “No celebramos la fiesta de la conquista, sino la resignificación de lo que somos como bogotanos, en una ciudad que ha padecido muchos siglos de exclusión y segregación social al igual que nuestros pueblos”.
La funcionaria resaltó el hecho de que este evento, tan importante para la capital, haya permitido tener a este selecto grupo de jóvenes que están dando un paso muy importante en sus vidas para ayudar a construir esa paz que necesita Colombia.
El programa “jóvenes en paz” empezó hace 10 meses y hasta agosto 3 se habían vinculado 9.096 jóvenes, para quienes no se hicieron convocatorias públicas, sino que fueron ubicados previamente en sus barrios y se les invitó a que voluntariamente ingresaran.
Flórez Schneider, dijo que estos jovencitos reciben el mejor regalo en esta Bogotá Humana e incluyente, dando el primer paso en la búsqueda de sus sueños y en la construcción de una ciudad justa donde los niños, niñas y adolescentes son fundamentales para nuestro país.
“Jóvenes en paz”, desde que yo llegué a la SDG, ha sido el mayor sueño del alcalde Gustavo Petro, y él ha sabido superar todos los obstáculos y le ha tocado pelear porque este programa sea posible; nosotros apenas hemos sido su aporte y soporte de este Plan de Gobierno que lidera”, argumentó.
Según el Idipron, se han hecho 222 jornadas de identificación; se han caracterizado 9.330 jóvenes, entre octubre de 2014 y agosto 3 de 2015 con jovencitos y jovencitas de Ciudad Bolívar, Usme, Rafael Uribe Uribe, San Cristóbal, Kennedy, Santafé, Suba, Bosa, Usaquén, Candelaria y Mártires.
Con su testimonio, se han venido convirtiendo en intermediarios de la transformación de su vida, su entorno, su barrio, con su comunidad y con la ciudad; y a cambio reciben 30 mil pesos diarios que se les entregan mensualmente según los días que hayan cumplido como garantía de permanencia.
Al programa se han vinculado los jóvenes de Misión Bogotá Humana y otros, considerados los históricos del Idipron que hacen parte del programa Economía para la Vida y tiene la oportunidad de estudiar en primaria o bachillerato en la Escuela Pedagógica Integral Idipron, o formación técnica laboral en el SENA, cuyos convenios incluyen 13 programas; 6 de ellos se relacionan con TIC, recursos humanos, auxiliar administrativo, mantenimiento de motores de gasolina y gas, entre otros.