Un estudio sobre el uso de la coca en Bolivia difundido este miércoles concluye que el país necesitaría no más de 14.705 hectáreas para abastecer el consumo legal de la hoja de la planta, aunque los cultivos superan las 25.000 hectáreas, excedente que se presume utiliza el narcotráfico.
El Estudio Integral sobre Consumo de Hoja de Coca, financiado por la Unión Europea (UE), refleja que en Bolivia existe una demanda anual de 20.690 toneladas para la comercialización y distintos usos legales.
"Aplicando la fórmula econométrica de rendimiento de 1.407 toneladas por hectárea por año, nos da una superficie proyectada de 14.705 hectáreas, como una cifra que nos da una referencia acerca de la superficie necesaria para el consumo tradicional", dijo el ministro de Gobierno, Carlos Romero, en conferencia de prensa.
Según la oficina de control de drogas de la ONU, en Bolivia hay 25.300 hectáreas plantadas de hoja de coca, lo que reflejaría un excedente de más de 10.000 hectáreas ilegales, que se presume destinados a la fabricación de cocaína y sujetas a erradicación por parte de los programas que lleva adelante el gobierno boliviano.
El gobierno boliviano entregó el informe de manera reservada la noche del martes a dirigentes de la región de Yungas --en las estribaciones cordilleranas en el departamento de La Paz-- y Chapare --en los valles de Cochabamba (centro)-- que concentran más del 95% de los cultivos de coca existentes.
El ministro Romero señaló que tras conocerse el informe, el Poder Ejecutivo boliviano "tomará decisiones políticas" sobre los cultivos, aunque aclaró que el estudio "no es vinculante".
Una ley de la década de 1980 establece que se consideran cultivos legales los existentes hasta un límite de 12.000 hectáreas.
El gobierno de Evo Morales abrió varias veces la posibilidad de llevar ese límite a un máximo de 20.000 hectáreas, como piden los cocaleros.
Morales se formó políticamente como dirigente de los cocaleros y ejerce aún el cargo de "presidente" de las seis federaciones del sector.
El dirigente de Chapare (centro) y senador Julio Salazar aclaró tras recibir el reporte que "hay que seguir haciendo estudios, por ejemplo en temas de exportación e industrialización y ver qué derivados exportamos".
Bolivia busca mercados externos para la coca, como por ejemplo los países del ALBA, y emprende la construcción de fábricas para industrializar la coca con fines legales, principalmente para infusión.
Tres de cada diez bolivianos consumen coca
"En cifras globales, la encuesta determinó que al menos tres de cada 10 bolivianos y bolivianas consume hoja de coca de manera habitual y tradicional", señala el informe del Ministerio de Gobierno (Interior) entregado a la AFP.
"La población estimada de consumidores para el año 2012 es de 3.082.464" personas, de un total de 10.027.000 habitantes en Bolivia, de acuerdo con datos del estatal Instituto Nacional de Estadísticas.
El informe fue realizado por consultores contratados por el gubernamental Consejo Nacional de Lucha Contra el Tráfico Ilícito de Drogas, una instancia que agrupa a varios ministerios, con financiamiento de 1,5 millones de dólares de la UE.
Bolivia permite el consumo legal de la hoja de coca para infusión, mascado y rituales religiosos y lleva adelante iniciativas para evitar que el plantío sea destinado a la fabricación de cocaína.
Los programas de erradicación de los cultivos de coca considerados para destino del narcotráfico han tenido pocos resultados desde la década de 1980, pues los campesinos cambian de zonas y siguen sembrando la planta en otros sitios.
Bolivia es el tercer productor mundial de coca y cocaína, después de Perú y Colombia, según la ONU./AFP