La Procuraduría General de la Nación formuló pliego de cargos en contra del general retirado Rodolfo Bautista Palomino López, en su condición de director general de la Policía Nacional, por presunta responsabilidad disciplinaria al ordenar al coronel Flavio Heriberto Mesa Castro, comandante del departamento de Policía de Cundinamarca que se contactara con el coronel Ciro Carvajal Carvajal, secretario general de esa institución y se reunieran con el coronel Reinaldo Alfonso Gómez Bernal, con el fin de influenciar en este y lograr que se retractara de lo consignado en su contra en oficio del 5 de mayo de 2015, y a cambio le ofrecieron la absolución por una investigación disciplinaria que adelantaba en su contra.
Goméz Bernal solicitó en dicho oficio al director de la Policía que frenara la persecución laboral en su contra, la cual derivaba en situaciones como “pretensiones amorosas y sexuales por parte del general Palomino hacia él, ejercicio indebido de control disciplinario dando órdenes para sancionarlo movido por pasiones sentimentales y situaciones administrativas, presuntamente, irregulares relacionadas con el ascenso de patrulleros y uniformados en la Institución”.
Presuntamente, el general Rodolfo Palomino habría ordenado a los oficiales Ciro Carvajal y Flavio Heriberto Mesa para que influyeran irregularmente sobre Gómez Bernal haciendo uso de sus funciones disciplinarias y cargos hasta lograr que se retractara de su escrito.
De esta forma, el general Palomino posiblemente incurrió en falta disciplinaria gravísima, según lo señalado en el numeral 42 del artículo 48 del Código Disciplinario Único, que indica que un servidor público, valiéndose de su cargo, influya en otro servidor para conseguir una actuación, concepto o decisión que le pueda general directamente un beneficio de cualquier orden para sí, poniendo en entre dicho principios de la moralidad pública y la imparcialidad que deben observar todos los servidores públicos.
De igual forma, el Ministerio Público formuló pliego de cargos en contra de los coroneles Flavio Heriberto Mesa Castro, en su condición de comandante de la Policía en Cundinamarca y Ciro Carvajal Carvajal, secretario general de la Policía, por congregarse con el jefe del área jurídica, Jhon Santos Quintero, para instigar, por orden del general Palomino, a Gómez Bernal para que se retractara de las acusaciones en contra del director de la Institución.