¿Primera baja por reelección de Santos? | El Nuevo Siglo
Lunes, 6 de Febrero de 2012

 

Si bien desde el año pasado allegados al procurador Alejandro Ordóñez habían indicado que a éste no le trasnochaba que su nombre estuviera sonando como posible precandidato presidencial del Partido Conservador, lo cierto es que su anuncio ayer de buscar repetir periodo al frente del Ministerio Público tiene muchas lecturas.

La primera y más obvia e inmediata se refiere a que Ordóñez sabe que su gestión ha sido muy reconocida y que la forma drástica en que ha sancionado a los implicados en escándalos de corrupción y otros casos de impacto público, sin importar que militen en el uribismo, la izquierda u otras tendencias políticas o ideológicas, le permiten consolidar las credenciales suficientes para aspirar a seguir en el cargo. El antecedente de su antecesor Edgardo Maya, primero en conquistar la reelección, es un aliciente para sus aspiraciones.

Sin embargo, hay otra óptica para analizar. Se trata, sin duda alguna, de la forma en que poco a poco el llamado “país político” empieza a admitir sin ambages que la posibilidad de que el actual jefe de Estado Juan Manuel Santos aspire a la reelección en 2014 es cada día más cercana.

Aunque a finales del año pasado el Mandatario expresó que sólo pensaría en un segundo periodo si no alcanza a completar en su cuatrienio las principales columnas vertebrales de su gobierno, a comienzos de este 2012 decidió “congelar” el tema al advertir que no hablaría del mismo sino en 2013.

Para algunos analistas la postura de Santos es muy inteligente, pues apenas lleva año y medio en el poder y sería desgastante y un error político craso dejarse enredar en el debate de la reelección (pese a que el tema lo pusieron sobre el tapete los propios liberales y al interior de la propia coalición de Unidad Nacional).

Sin embargo, hay otros para los que esa decisión va más allá de la necesidad de concentrarse en su tarea de gobierno y evitar fisuras tempraneras en su coalición parlamentaria mayoritaria. Sostienen que al aplazar para 2013 un anuncio sobre si buscará repetir en la Casa de Nariño, lo que está haciendo es, precisamente, enviar un mensaje tácito pero perceptible de que sí se postulará en 2014 y no quiere que por ahora, sobre todo desde la orilla del ex presidente Uribe, le empiecen a plantear y postular competencia por el tiquete de La U.

Esa percepción creciente de que Santos, que domina 90% del Congreso y conserva índices de aprobación y favorabilidad en las encuestas superiores a 70 por ciento, buscará la reelección, estaría llevando ya a varios de los precandidatos que han venido sonando, a buscar nuevos horizontes, más seguros. En ese orden de ideas, Ordóñez tenía dos caminos: pensar en ser el aspirante presidencial del conservatismo en 2014 o buscar su reelección en la Procuraduría en el segundo semestre de este año. Se habría inclinado por lo segundo, pues el escenario y las probabilidades de triunfo le son más favorables.

Igual podría pasar con otros de los presidenciables que están haciendo cola y estaban a la expectativa de que Santos se definiera este año, por tardar en el segundo semestre. Pero no lo hizo, y apostar a que el Jefe de Estado tenga una crisis en su gobierno y sus índices de aceptación y margen de acción política caigan estruendosamente, resulta muy riesgoso, casi un albur. Por lo mismo, antes que esperar un año para conocer una decisión que todos intuyen (que el Presidente sí buscará un segundo mandato), lo mejor es ir buscando nuevos caminos y opciones.