El Ministro de Agricultura y Desarrollo Rural, Rubén Darío Lizarralde, anunció que el sector demanda cada vez más recursos y que el presupuesto mínimo anual debe ser de 10 billones de pesos. Los actuales recursos suman 5 billones y los adicionales para el 2015 se destinarían a infraestructura y tecnología para garantizar la disponibilidad de agua para la producción.
“Los elementos fundamentales, prioritarios en los cuales deberíamos invertir es en el manejo de agua, expresado en riegos y drenajes, canalizaciones y embalses, que además sirven para reducir el impacto de fenómenos como el de la niña o el niño. Los otros son vías terciarias, investigación y desarrollo y asistencia técnica”, expresó el Ministro en el marco de la cuarta parada del Diamante Agropecuario Caribe y Santanderes, hoy en Cúcuta.
La inversión adicional es necesaria para aprovechar la demanda mundial por alimentos, el amplio potencial agrícola del país -cultivamos menos del 25% del área que se podría utilizar-, conquistar los mercados internacionales y darle impulso a los programas de apoyo a la competitividad y productividad.
Así mismo, en un análisis realizado junto con el Incoder se determinó que dotar de infraestructura y tecnología de riego y drenaje a más de 2.5 millones de hectáreas, una de las metas mega del Ministerio, tiene un costo de 56.5 billones de pesos.
“En una evaluación inicial que se hizo con el Incoder se estableció que se requieren más de 50 billones de pesos en un periodo entre ocho y 12 años para tener en el país un manejo primario adecuado de aguas”, expreso el jefe de la cartera agropecuaria.
El Ministro ha insistido en que la mejor forma de impactar al campesino e incentivar la agricultura es proveerla de bienes públicos y en particular de distritos de riego que abastezcan de agua grandes extensiones de tierra, garantizando así su disponibilidad para la producción.
“Ese es el paso que tenemos que dar para asegurarle un mejor ingreso futuro a los campesinos, invirtiendo más en bienes públicos y menos en subsidios”, recalcó.
La inversión del “Plan Básico de Adecuación de Tierras en Colombia”, como lo denominó el Incoder, impactaría todo tipo de cultivos y productores, permitiría producir más toneladas por cada hectárea cultivada y aumentaría tanto el volumen como la calidad de los productos, lo que se traduce en más empleo y mejores ingresos para la ruralidad.
La programación de metas, costos e inversiones del Plan se hizo con base en las necesidades de rehabilitación de distritos en operación de propiedad del Estado de pequeña, mediana y gran escala, en la finalización de aquellos en construcción y en el diseño y estructuración de proyectos en estudio.
El desarrollo de dicho Plan motivará y atraerá mayores inversiones al sector y ayudaría a lograr el objetivo de un crecimiento del PIB agropecuario de 5% anual.
Oferta institucional dijo “presente” en Norte de Santander
Las entidades adscritas y vinculadas al Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural son los principales aliados de los productores agropecuarios y tienen disponibles diferentes servicios para el crecimiento de las empresas rurales.
Por ejemplo, el Banco Agrario de Colombia puso a disposición de los norte santandereanos la Línea de Crédito para la reconversión, modernización productiva y competitividad – TLC, que tieneel objetivo de financiar las inversiones para aumentar la innovación, agregación de valor, sostenibilidad ambiental, económica y técnica de la actividad agropecuaria frente a los tratados de libre comercio y la globalización de la economía.
“Esta línea nace de la necesidad de satisfacer y dar soluciones a las problemáticas del sector rural con las características y beneficios que este segmento específico necesita de cara a los Tratados de Libre Comercio y globalización de la economía”, afirmó el presidente del BAC. Álvaro Navas.
La Línea trae beneficios como financiación de hasta el 100% de los costos directos de la inversión, tasas de interés negociables de acuerdo con las condiciones de mercado y plazos de hasta 20 años.
Por su parte, la Unidad de Planificación Agropecuaria, UPRA, explicó que los productores pueden conocer los estudios de uso y vocación de la tierra de los 32 departamentos del país en la página www.upra.gov.co en el link de Productos de Información Geográfica. De esta forma, podrán tomar decisiones acertadas sobre qué sembrar y producir de acuerdo a la demanda.
Por su parte, el Fondo para el Financiamiento del Sector Agropecuario (FINAGRO) informó que con corte a abril, ha desembolsado al departamento de Norte de Santander $42.933 millones; el rubro más importante es la palma de aceite con $12.478 millones. En el mismo periodo para la región del Diamante, FINAGRO ha otorgado:
En crédito $376 mil millones entre enero y marzo de 2014 para cerca de 2.000 operaciones en la región del Diamante. Es decir, la zona participa con el 25% del total de los desembolsos nacionales. Las actividades que mayor participación tienen son la ganadería (29%), palma de aceite (17%), avicultura (14%), arroz (6) y leche (5%).