Las fuerzas paramilitares iraquíes avanzaban ante los yihadistas en el segundo día de su ofensiva para cortar las vías de abastecimiento entre la ciudad de Mosul (Irak) y los territorios que el grupo Estado Islámico (EI) controla en Siria.
Combatientes de las Unidades de Movilización Popular (Hashd al Shaabi), una coalición de milicias chiitas apoyadas por Irán, recuperaron dos localidades y varias zonas de los alrededores, anunciaron en varios comunicados.
Uno de estos pueblos es AL Imraini, situado a 45 kilómetros de Tal Afar, el objetivo principal de su ofensiva. Este municipio estaba mayoritariamente habitado por musulmanes chiitas antes de que los yihadistas del EI lo conquistaran en 2014.
Las Hash al Shaabi pretenden cortar las vías de aprovisionamiento del EI entre Mosul y el este de Siria, en particular con su bastión de Raqa.
Su participación en la operación, lanzada el 17 de octubre para arrebatarle al EI la única gran ciudad que todavía controla el grupo en Irak, es un foco de tensión en la coalición antiEI, pues tanto los kurdos como los árabes sunitas iraquíes se oponían.
Las milicias chiitas aseguraron que no tenían intención de entrar en la ciudad de Mosul, de mayoría sunita, tras haber sido acusadas de haber cometido exacciones al entrar en otras localidades habitadas por sunitas, como Faluya o Ramadi.
Las relaciones entre estos grupos paramilitares y la coalición internacional liderada por Estados Unidos, así como con la vecina Turquía, también son difíciles.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, les lanzó una advertencia por si atacaban a las poblaciones turcómanas de Tal Afar.
"Si los Hash al Shaabi siembran el terror allí, nuestra respuesta será diferente", amenazó, según la agencia oficial Anadolu, sin precisar qué medidas tomaría en tal caso.
Por otro lado, los combates al oeste de Mosul podrían de nuevo amenazar la ciudad antigua de Hatra, inscrita en el patrimonio mundial de la Humanidad de la Unesco, y las célebres ruinas de Nimrud, dos sitios arqueológicos ya vandalizados por el EI.
La operación en Mosul avanza también por el sur, donde las fuerzas federales retomaron el sábado la localidad de Al Shura, una zona de combates desde hace más de una semana.
Al este, el frente parecía estar más calmo. En la ciudad cristiana de Bartella, a cinco kilómetros al este de Mosul, el ejército y sus cuerpos de élite de contraterrorismo consolidaban sus posiciones instalando un nuevo depósito./AFP