El presidente ucraniano Petro Poroshenko pidió la dimisión de su primer ministro Arseni Yatseniuk y del fiscal general, ambos muy criticados por la tardanza en la aplicación de reformas.

"El presidente pidió al fiscal general y al primer ministro que dejen sus cargos para restaurar la confianza en el poder", escribió en Twitter el portavoz del jefe de Estado, Sviatoslav Tsegolko.

Le corresponde no obstante a la Rada, el parlamento ucraniano, decidir sobre el futuro de los dos hombres.

Poroshenko ha descartado la posibilidad de elecciones legislativas anticipadas, al asegurar que un nuevo gabinete será formado por la coalición prooccidental actualmente en el poder.

El primer ministro Yatseniuk, en el cargo desde hace dos años,  era muy criticado en los últimos meses por las insuficiencia de las reformas que prometió, así como por la defensa que se le atribuye de los intereses de los oligarcas.

El primer ministro corría el riesgo de quedar sometido desde este martes a una moción de censura en el parlamento.

El fiscal Viktor Chokin está acusado por sus detractores de no hacer nada contra la corrupción, e incluso de encubrirla ya que se trata de oligarcas afines al poder.