Presidente Ortega defiende proyecto reeleccionista | El Nuevo Siglo
Viernes, 29 de Noviembre de 2013

El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, defendió el polémico proyecto de reforma constitucional que su partido puso en marcha en el Congreso con la finalidad de eliminar la prohibición a la reelección sucesiva y nombrar a militares en el gobierno.

"Estoy seguro (de que con estas enmiendas) habrá más tranquilidad, más seguridad, más paz, más alegría y más esperanzas en el pueblo nicaragüense", dijo Ortega durante la ceremonia de ascenso de 36 cadetes de policías en la plaza de la Revolución de Managua.

Esta es la primera vez que Ortega habla sobre el proyecto de reformas que el Congreso, dominado por diputados de su partido Frente Sandinista (FSLN, izquierda) pueden aprobar en los próximos días, en medio de posiciones divididas a favor y en contra.

"Estoy convencido que cuando estas reformas sean aprobadas en la Asamblea Nacional habrá una inmensa mayoría de nicaragüenses que se sentirán satisfechos", agregó el mandatario, sin referirse a la propuesta de reelección presidencial que más polémica ha causado en el país.

El proyecto plantea abolir la norma constitucional que prohibía la reelección presidencial sucesiva y alterna desde 1996, abriendo a Ortega el camino a un cuarto mandato en las elecciones de 2016, y tercero sucesivo desde 2007.

Propone, además, que los militares accedan a cargos públicos, que protejan el espectro radioeléctrico y satelital; pospone las elecciones municipales de 2016 a 2017 y legitima la alianza entre el gobierno y empresarios, entre otros puntos.

Una comisión legislativa aprobó el jueves, tras una consulta de dos semanas, someter el proyecto de reformas a discusión y aprobación del plenario antes del 15 de diciembre.

Ortega dijo, sin embargo este viernes, que todavía "hay muchos aspectos" del proyecto que "están siendo modificados" por los diputados para "evitar suspicacias", sin precisar en que consistían.

El mandatario aseguró que la reforma conserva los principios de la Constitución aprobada en 1987, durante su primer gobierno revolucionario en los años 1980.

La enmienda debe ser aprobada en dos legislaturas (dos años consecutivos) con el voto de al menos 56 de los 92 diputados del congreso, donde los sandinistas tienen 63 escaños./AFP