El grupo Estado Islámico (EI) reivindicó este viernes la decapitación de un cuarto rehén, el cooperante humanitario británico Alan Henning, en represalia por los ataques aéreos británicos contra EI en Irak, y amenaza con matar a otro, el estadounidense Peter Kassig.
El video de la ejecución, difundido por el centro estadounidense de vigilancia de los cibersitios islamistas SITE, se titula "un nuevo mensaje a Estados Unidos y sus aliados". La grabación fue realizada siguiendo el mismo guión que las ejecuciones precedentes de los estadounidenses y un británico.
Alan Henning, de 47 años, lleva la misma vestimenta de color naranja que las víctimas precedentes, que recuerda los uniformes de los presos de Guantánamo. Pronuncia sólo una breve frase antes de que su verdugo, vestido de negro y con el rostro disimulado como las veces anteriores, retoma la palabra para responsabilizar de su muerte al Parlamento británico.
"El brutal asesinato de Alan Henning por EI sólo muestra hasta qué punto son bárbaros y repulsivos estos terroristas", declaró en un comunicado el primer ministro británico, David Cameron, que expresó su apoyo a la familia y amigos del cooperante.
"Alan había viajado a Siria para llevar ayuda a personas de toda confesión que la necesitaban. El hecho de ser capturado como rehén cuando estaba queriendo ayudar a los demás, y ahora ser asesinado, muestra que la perversión de estos terroristas de Estado Islámico no tiene límites", agregó el primer ministro.
El verdugo, cuya voz parece haber sido modificada electrónicamente, tiene sin embargo un acento británico y parece ser el mismo, según SITE, que asesinó a mediados de setiembre al rehén británico David Haines.
Al final del video, que dura un minuto y 11 segundos, EI presenta a otro rehén estadounidense.
El presidente Barak Obama calificó de "brutal" el asesinato y aseguró que Estados Unidos llevará a los responsables ante la Justicia. "Junto a una amplia coalición de aliados y socios, continuaremos tomando acciones decisivas para degradar y, en última instancia, destruir al EI", dijo en una declaración.
"Es otra demostración de la brutalidad de este grupo" y "era el motivo por el que el presidente había puesto en marcha una estrategia para debilitar y destruir a EI", declaró Lisa Monaco, consejera de Obama en materia de terrorismo.
El presidente francés, François Hollande, expresó su "indignación" por este "crimen odioso" y aseguró que "no quedará impune", en un comunicado publicado por el Elíseo.
Los islamistas de EI proseguían el asedio de la ciudad kurda de Kobane, donde las fuerzas kurdosirias oponían una resistencia desesperada.
"Haremos cuanto podamos para que Kobane no caiga", dijo el primer ministro turco Ahmet Davutoglu al día siguiente de que el Parlamento autorizara una acción militar contra EI en Siria e Irak y la presencia de tropas extranjeras en territorio turco.
- Inferiores en número -
Davutoglu añadió que "no se ha tomado ninguna decisión sobre una eventual acción militar", pero Siria advirtió ya que considerará cualquier intervención militar turca en su territorio como una "agresión".
Ankara está inquieta por la situación de la tercera ciudad kurda de Siria, situada muy cerca de Turquía, donde la ofensiva lanzada hace más de dos semanas por EI obligó a más de 180.000 personas a buscar refugio al otro lado de la frontera.
Kobane (Ain al Arab en árabe) sufrió el bombardeo más violento desde el principio del asalto yihadista, con al menos 80 obuses de mortero disparados por EI, según el Observatorio Sirio de los Derechos Humanos (OSDH).
Desde hace varios días, los yihadistas se han acercado por el sur, este y sureste a Kobane, defendida a duras penas por combatientes de las Unidades de Protección del Pueblo (YPG, principal milicia kurda), inferiores en número y armamento.
Al anochecer, la televisión de información CNN-Türk señaló varios ataques de la coalición contra posiciones de EI alrededor de Kobane.
Compuesto por decenas de miles de hombres reclutados sobre todo en el extranjero -un grupo de chechenos forma parte de los asaltantes de Kobane, según el OSDH-, EI controla varias regiones de Siria, país arrasado por más de tres años de guerra civil, y la vecina Irak.
La toma de Kobane, donde todavía pueden quedar miles de civiles, permitiría a EI controlar una franja de territorio ininterrumpida en la frontera con Turquía.
En Irak, el ejército ganó terreno el viernes con la reconquista de Duluiya, al norte de Bagdad, donde se registran encarnizados combates desde hace cuatro meses entre yihadistas y fuerzas gubernamentales aliadas con tribus sunitas, según el portavoz del Ministerio de Defensa, Mohammed al Askari. Combatientes tribales indicaron, sin embargo, que la ciudad no fue liberada completamente.
También al norte de la capital, el Ejército iraquí consiguió recuperar una decena de localidades, pero al oeste de Bagdad fueron los yihadistas los que se hicieron con el control de una parte de la ciudad de Hit, provincia de Al Anbar, donde las fuerzas gubernamentales siguen perdiendo presencia.
El portavoz del Ministerio de Defensa iraquí también señaló la pérdida de un helicóptero, derribado en la región de Baiji, a 200 km al norte de Bagdad.
Desde su ofensiva fulgurante en junio al norte de Bagdad, EI se ha apoderado de amplios sectores de cinco provincias, incluyendo Mosul, la segunda ciudad del país, ahora cuartel general yihadista.