Presidente de Yemen rechaza plan de paz de la ONU | El Nuevo Siglo
Foto Agence France Press
Sábado, 29 de Octubre de 2016
Redacción Web con AFP

El presidente yemení, Abd Rabo Mansur Hadi, rechazó el plan de paz propuesto por la ONU para poner fin al conflicto que azota a su país, al tiempo que los rebeldes denuncian bombardeos de la coalición árabe liderada por Riad que lo apoya.

Al recibir al mediador de Naciones Unidas, Ismail Uld Sheij Ahmed, "rechazó la propuesta de la ONU", informó este sábado a la AFP una fuente presidencial.

Los detalles de este plan de paz no se hicieron públicos, pero fuentes próximas al asunto afirmaron que preveía que el presidente Hadi nombrara a un nuevo vicepresidente, después de la retirada de los rebeldes de la capital, Saná, y de otras ciudades, y la entrega de las armas pesadas a terceros.

Hadi transmitiría su poder al vicepresidente, que nombraría a un nuevo primer ministro, encargado de formar un gobierno en el que el norte y el sur de Yemen tendrían una representación equitativa. Los rebeldes hutíes chiitas son originarios del norte y se quejan de que están marginados por las autoridades centrales.

Un comunicado de la agencia gubernamental sabanew.net confirma que el presidente rechazó el plan, y cita a Hadi diciendo que la proposición "abre aún más la puerta al sufrimiento y a la guerra y no es un plan de paz".

Emiratos Árabes Unidos, que tiene un papel clave en la coalición árabe, había saludado el jueves la propuesta de paz, calificándola de "solución política".

La guerra entre los rebeldes chiitas hutíes, aliados de los partidarios del expresidente Ali Abdalá Saleh, y las fuerzas gubernamentales leales a Hadi, apoyadas por una coalición árabe liderada por Arabia Saudí, ha dejado casi 7.000 muertos en Yemen y al menos tres millones de desplazados en 18 meses.

La coalición ha sido acusada en múltiples ocasiones de cometer "errores" al haber matado a numerosos civiles en sus bombardeos.

 

- Edificios 'completamente destruidos" -

 

Este sábado, al menos 17 civiles murieron en Salo, en el suroeste del país, en ataques aéreos de la coalición militar árabe, según los rebeldes.

El bombardeo alcanzó a edificios de un barrio residencial de la ciudad de Salo, escenario de combates entre los rebeldes y las fuerzas leales a Hadi. En total se contabilizaron 17 muertos y 7 heridos.

Según medios de prensa locales, la mayoría de las víctimas eran mujeres, y tres edificios residenciales resultaron "completamente destruidos" en los bombardeos.

Por su parte, un médico del hospital público de la ciudad indicó a la AFP que había recibido 15 cadáveres y siete heridos.

Según la agencia de prensa de los rebeldes, las víctimas de los bombardeos aéreos eran personas desplazadas por la guerra.

La coalición árabe todavía no hizo ningún comentario a raíz de estas informaciones, pero un responsable local leal al gobierno yemení confirmó los bombardeos y afirmó que éstos habían alcanzado por error a tres viviendas. "Todas [las personas] que había dentro murieron", declaró a la AFP. 

Varios testigos contaron a la AFP que numerosos habitantes habían acudido al lugar del bombardeo para intentar salvar a los heridos.

El mismo sábado, las fuerzas de seguridad frustraron un ataque suicida con coche bomba contra el Banco Central de Yemen, en Adén. Abrieron fuego contra el vehículo, haciéndolo explotar antes de que alcanzara su objetivo, informó un responsable de la seguridad.

El Banco Central fue trasladado en septiembre a Adén, la segunda ciudad del país y capital "provisional" del presidente Hadi, que vive exiliado en Arabia Saudí. El mandatario había ordenado este traspaso tras acusar a los rebeldes hutíes de haber utilizado las reservas de divisas.