Presidente Al Asad no dejará el poder: ministro sirio en Suiza | El Nuevo Siglo
Miércoles, 22 de Enero de 2014

Las grandes potencias exhortaron el miércoles al régimen y a la oposición sirios a aprovechar la oportunidad "histórica" de terminar con casi tres años de guerra, al iniciarse una conferencia de paz en Suiza, en la que la delegación de Damasco repitió que Al Asad no dejará el poder.

"Después de casi tres dolorosos años de conflicto y de sufrimientos en Siria, hoy es un día de esperanza", declaró el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, en su discurso de apertura de la conferencia de Ginebra II ante los representantes de unos cuarenta países y organizaciones, entre los que se encontraban las delegaciones del régimen del presidente sirio, Bashar al Asad, y de la coalición siria.

"Nos enfrentamos a unos desafíos extraordinarios", advirtió. "Todos los sirios tienen hoy sus miradas puestas en nosotros", "ustedes, los representantes de la oposición y del gobierno sirio, tienen una gran oportunidad" y una "responsabilidad con el pueblo sirio", añadió.

Los patrocinadores de esta conferencia, los jefes de la diplomacia rusa, Serguéi Lavrov, y estadounidense, John Kerry, advirtieron que las negociaciones entre el régimen y la oposición "no serán sencillas, ni serán rápidas", en palabras de Lavrov.

Pero durante sus cortas intervenciones, Kerry y Lavrov también mostraron sus divergencias respecto a la formación de un gobierno de transición en Siria.

"Bashar al Asad no formará parte del gobierno de transición. Es imposible, inimaginable que este hombre que llevó a cabo semejante violencia contra su pueblo pueda conservar la legitimidad para gobernar", declaró Kerry.

Por el contrario, Lavrov advirtió sobre "los intentos de interpretar este documento de una forma o de otra", en referencia al llamamiento a la formación de un gobierno de transición "por mutuo consentimiento" que las grandes potencias adoptaron en 2012 sin presencia de los sirios en Ginebra I.

El ministro de Relaciones Exteriores sirio, Walid Mualem, calificó a los representantes de la oposición sentados frente a él de "traidores" y de "agentes a sueldo de los enemigos" de Siria.

"Pretenden representar al pueblo sirio", declaró Mualem. "Si quieren hablar en nombre de los sirios, no deberían ser traidores al pueblo sirio, agentes a sueldo de los enemigos del pueblo sirio", añadió.

"Señor Kerry, nadie en el mundo tiene derecho a otorgar o retirar la legitimidad de un presidente, una Constitución o una ley excepto los propios sirios", declaró también Mualem en respuesta a las declaraciones de Kerry descartando cualquier papel de Al Asad en una transición.

También el ministro sirio de Información, Omran al Zohbi, insistió en que el presidente no dejará el poder. "Asad no se irá", dijo el ministro al margen de la conferencia.

Mualem fue interrumpido durante su larga defensa de la política del régimen de Al Asad por Ban, que objetó que el jefe de la diplomacia siria había superado el tiempo de palabra asignado. Mualem replicó diciendo que tenía que expresar la posición de su país y continuó con su intervención.

Tras los primeros discursos, Estados Unidos criticó el tono del discurso del régimen sirio en Montreux. "En vez de dar una visión positiva para el futuro de una Siria plural y respetuosa de los derechos de todos, el régimen optó por una retórica incendiaria", señaló un comunicado del Departamento de Estado.

Por su parte, el jefe de la delegación de la oposición siria, Ahmad Jabra, instó al presidente Al Asad a que entregue el poder a un gobierno de transición.

Su discurso fue retransmitido por la televisión siria, pero sin citar su nombre y mostrando, junto a las imágenes de su intervención, otras imágenes de muertos y destrucción con el título "Crímenes terroristas en Siria". Durante la alocución de los ministros de Exteriores de Turquía y de Arabia Saudita -principales partidarios a la oposición-, la televisión siria procedió de la misma manera.

El jefe de la diplomacia francesa, Laurent Fabius, advirtió a la delegación del régimen sirio que el objetivo de Ginebra II no es hablar de "terrorismo", sino de "un gobierno de transición".

"No se trata de tener un debate general sobre Siria, ni de lanzar invectivas o eslóganes de propaganda, ni tampoco de ganar tiempo o pronunciar discursos repitiendo la palabra terrorismo" -término que emplean las autoridades sirias al referirse a las acciones de los rebeldes-, declaró Fabius.

Resumiendo el estado de ánimo de muchos participantes en la conferencia, el ministro de Relaciones Exteriores alemán, Frank-Walter Steinmeier, consideró que no hay que esperar un "milagro".

Desde la también ciudad suiza de Davos, donde se celebra el Foro Económico Mundial, siete organizaciones (entre ellas Aministía Internacional y Human Rights Watch), pidieron a la comunidad internacional que presione a las partes beligerantes y a los países vecinos para que se encuentre una solución para Siria. "La reputación de Naciones Unidas y de los miembros del Consejo de Seguridad están en juego", señalaron.

La reunión de Montreux servirá para preparar el encuentro el viernes en Ginebra de las dos delegaciones sirias -que se reúnen por primera vez desde el inicio del conflicto- con la mediación del emisario especial de Naciones Unidas y de la Liga Árabe, Lakhdar Brahimi./AFP